El municipio de Curillo, en Caquetá, enfrenta una de las emergencias más graves de los últimos tiempos, luego de que el río Caquetá se desbordara, dejando a su paso devastación y cientos de familias damnificadas. Imágenes captadas desde el aire muestran la magnitud del desastre, que ha afectado tanto al casco urbano como a sectores rurales.
La situación no solo golpea a Curillo. Municipios vecinos como Puerto Guzmán, en Putumayo, y Piamonte, en el Cauca, también reportan serias afectaciones por la creciente. La emergencia ha generado alarma en toda la región.
Organismos de socorro y autoridades locales trabajan contrarreloj para atender a las personas afectadas, mientras intensifican las labores de rescate y evaluación de daños. Aunque aún no se tiene un balance exacto, se anticipa que las cifras de damnificados podrían ser elevadas.
Ante la crítica situación, las autoridades han hecho un llamado urgente a la solidaridad. Se solicita apoyo inmediato con alimentos, agua potable, medicinas y otros elementos básicos, necesarios para atender la emergencia humanitaria que hoy sacude a estas comunidades. Según reportes recientes, el municipio de Curillo, Caquetá, ha registrado entre 200 y 500 familias damnificadas debido a las inundaciones causadas por el desbordamiento del río Caquetá.



