La comunidad del municipio de El Bordo, en el departamento del Cauca, se encuentra sumida en la angustia y la incertidumbre tras la retención de dos jóvenes por parte de un grupo armado al margen de la ley. Entre los retenidos se encuentra Stiven Quiñónez, un joven que actualmente presta su servicio militar en el Ejército Nacional, y su novia, Milena Astudillo. Según los reportes preliminares, el hecho ocurrió en el sector de Guachicono, jurisdicción del municipio de Bolívar, mientras ambos participaban en una válida de stunt.
Interceptados
El evento, que transcurría en un ambiente de emoción y adrenalina, se vio abruptamente interrumpido cuando un grupo de hombres armados, movilizándose en una camioneta, irrumpió en el lugar. Testigos afirman que los sujetos interceptaron a Stiven y Milena y, sin mediar palabra, los obligaron a subir al vehículo antes de huir con rumbo desconocido. Desde entonces, sus familiares han vivido horas de angustia, sin información clara sobre su paradero o el motivo de la retención.
Las familias de los jóvenes han hecho un llamado urgente a organismos de derechos humanos, entre ellos la Defensoría del Pueblo, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y demás entidades competentes, para que intervengan en la pronta liberación de los jóvenes. «Solo pedimos que Stiven y Milena regresen sanos y salvos al seno de su hogar. La incertidumbre nos consume, pero confiamos en que esta pesadilla tendrá un desenlace positivo», expresó un familiar con la voz entrecortada por el dolor.
Preocupación
El caso ha generado gran preocupación en la región, donde la violencia y la presencia de grupos armados ilegales siguen representando una amenaza constante para la población civil. La comunidad se mantiene en estado de alerta, elevando plegarias por la seguridad de los jóvenes y exigiendo a las autoridades actuar con rapidez y contundencia para garantizar su pronta liberación. Este lamentable suceso es un recordatorio de los desafíos que enfrenta la región y de la imperiosa necesidad de construir un entorno seguro y pacífico para todos los habitantes.
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Stiven Quiñónez y Milena Astudillo, secuestrados.
