En la tercera sesión del Puesto de Mando Unificado, PMU, para el control de medicamentos, el IDSN alertó sobre el aumento en el porcentaje de medicinas no entregadas en el departamento, que pasó del 19% en abril al 31% en junio.
Problema
A pesar del seguimiento permanente y exhaustivo realizado en articulación con entidades como la Defensoría del Pueblo, la Procuraduría, las secretarías y direcciones locales de Salud, la situación se sigue agravando.
Si bien se han implementado planes de mejora y acciones conjuntas, el IDSN advierte que el problema es estructural. La deuda acumulada de las EPS con los gestores farmacéuticos en el departamento supera los $74 mil millones de pesos, situación que compromete seriamente el abastecimiento de medicamentos y la continuidad de la atención a los usuarios.
Durante este encuentro, hizo presencia la directora del Instituto Departamental de Salud de Nariño, Ana Belén Arteaga y el funcionario de la oficina jurídica, Jose Luis Ocampo, quienes le hacen estricto seguimiento a esta situación.
Suspensión
Sumado a lo anterior, una nueva alerta se genera por la posible suspensión de servicios en los hospitales mentales San Rafael y Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, donde las deudas acumuladas por parte de las EPS alcanzan los 88 mil millones de pesos.
Estas circunstancias, han generando problemas de liquidez y ponen en riesgo la atención en salud mental, lo cual es uno de los servicios fundamentales en el departamento y que resulta necesario para la población.
Desde el Instituto se reitera el compromiso de continuar articulando esfuerzos con los distintos actores del sistema de salud, con el objetivo de encontrar soluciones de fondo que respondan a las necesidades de la población nariñense.
El propósito es mitigar esta problemática y brindar a los usuarios las garantías necesarias en los servicios de salud, teniendo en cuenta que es un derecho fundamental para las personas y que no puede ser vulnerado.




