Siete escoltas de la Unidad Nacional de Protección (UNP) que protegían al presidente Gustavo Petro fueron removidos de sus cargos después de que recibieran un mensaje a la medianoche ordenándoles entregar sus equipos de dotación. Esto sucedió después de que Augusto Rodríguez, director de la UNP y aliado cercano de Petro durante más de tres décadas, expresara críticas hacia el nombramiento de Armando Benedetti como jefe de despacho en calidad de encargado durante el Consejo de Ministros.
Según fuentes, la decisión de remover a los escoltas fue tomada por la Presidencia después de las críticas de Rodríguez. Los escoltas recibieron la notificación en sus teléfonos móviles a las 11:30 de la noche del martes 4 de febrero, ordenándoles presentarse en sus respectivas entidades para entregar los elementos de servicio.
