En medio del ritmo acelerado de la capital colombiana, existe un rincón verde que invita al descanso, la contemplación y el contacto directo con la naturaleza. Se trata del sendero ecológico de Monserrate, un recorrido entre bosques de pinos, eucaliptos y especies nativas, ideal para quienes buscan salir de la rutina sin alejarse de Bogotá.
Un pulmón verde en la ciudad
Ubicado en los cerros orientales, este sendero forma parte del sistema de áreas protegidas de Bogotá y se extiende por más de 1.5 kilómetros. A lo largo del camino, los visitantes pueden disfrutar de aire puro, sonidos naturales y una vista privilegiada de la ciudad.
El recorrido atraviesa zonas de restauración ecológica, donde se han sembrado especies nativas como el arrayán, el roble andino y el mano de oso, que conviven con pinos y eucaliptos introducidos décadas atrás. Esta mezcla de vegetación crea un ambiente fresco y silencioso, perfecto para el senderismo urbano y el turismo ecológico en Bogotá.
Actividades y recomendaciones para el visitante
El sendero está diseñado para caminatas tranquilas, observación de flora y fauna, fotografía de paisaje y meditación. Es común encontrar aves como el cucarachero, el colibrí y el copetón, además de pequeños mamíferos que habitan la zona.
Recomendaciones para disfrutar la experiencia:
- Usar ropa cómoda y calzado adecuado para terreno irregular.
- Llevar hidratación, protector solar y gorra.
- Respetar la señalización y no salirse del camino.
- No arrojar basura ni alterar el entorno natural.
El acceso es gratuito y está abierto al público en horarios diurnos. Se recomienda visitar en días entre semana para evitar aglomeraciones.
Un plan perfecto para desconectarse sin salir de Bogotá
Este sendero representa una alternativa sostenible para el turismo local, promoviendo el cuidado ambiental y el bienestar físico y mental. Es ideal para familias, parejas, estudiantes y adultos mayores que deseen reconectar con el entorno natural sin realizar desplazamientos largos.




