
Marcos Antonio Plazas Parra, y el segundo como el señor Uriel Pérez Gallo, fueron capturados en el hecho.
Según fuentes oficiales, los hechos se registraron alrededor de las3:50 de la tarde del jueves 15 de agosto, las unidades de bomberos del municipio de Tocaima reportaron un incendio en la vereda Guacana. Ante esta emergencia, nos dirigimos de inmediato al lugar para evaluar y controlar la situación. La rápida respuesta buscaba mitigar los efectos del siniestro y evitar su expansión hacia áreas adyacentes.
Al llegar al sitio del incendio, encontramos a dos ciudadanos presentes en el predio afectado. El primero de ellos fue identificado como el señor Marcos Antonio Plazas Parra, y el segundo como el señor Uriel Pérez Gallo. Ambos declararon que estaban realizando labores de limpieza en la propiedad cuando, de manera inadvertida, una colilla de cigarrillo arrojada provocó el inicio del incendio. Este evento desató un fuego que rápidamente se extendió, causando daños significativos al predio y a fincas cercanas.
La declaración de los involucrados señala que el fuego fue un accidente, pero la magnitud del daño generado ha llevado a tomar medidas judiciales. Se ha procedido a la judicialización del caso, en virtud del artículo 333 del Código Penal, que aborda delitos relacionados con el daño a los recursos naturales y el ecocidio. Este artículo establece sanciones para quienes causen daños graves al medio ambiente, lo que en este caso se considera una grave afectación a los recursos naturales locales.




