Señalado de crear escuelas criminales

[responsivevoice_button voice="Spanish Latin American Male" buttontext="Escuchar Noticia"]
Compartir en

Gracias a las labores investigativas y de inteligencia adelantadas por las autoridades en Colombia, en las últimas horas fue posible conocer como es el funcionamiento de las llamadas ‘escuelas móviles’ las cuales son dirigidas por el líder de las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, alias Iván Mordisco, donde menores de edad y jóvenes son sometidos a entrenamientos militares en medio de la selva. Es de recalcar que en su mayoría estos centros de reclutamiento, se encuentran distribuidos en diferentes departamentos del país entre los cuales se encuentra la región nariñense.

Aparentemente en dicho proceso los participantes, en su mayoría adolescentes, aprenden tácticas de guerra y son preparados para formar parte de los grupos armados ilegales.

Se presume que estos programas de entrenamiento tienen una duración aproximada a los dos meses y están diseñados para fortalecer las capacidades bélicas de los jóvenes. Durante este tiempo, los reclutados reciben formación en diversas disciplinas, que incluyen tácticas de infiltración, manejo de explosivos, y el uso de drones armados. Además, las jornadas empiezan a las 4:00 a. m. con ejercicios físicos intensivos, seguidos por clases ideológicas que promueven teorías socialistas.

Este tipo de hechos que cada vez preocupan más a las comunidades y a las autoridades de Colombia siguen generando alarma ya que uno de los aspectos que se dio a conocer es que al parecer los participantes sólo logran graduarse de dichas escuelas tras haber cometido una acción terrorista como tesis de grado. Con respecto a la ubicación de dichos escenarios, se estableció que están camuflados en zonas de difícil acceso, principalmente en la selva, y se desplazan constantemente para evitar ser localizadas por las autoridades. Cuando se detecta la presencia de operativos cerca de las ubicaciones de estos centros, los jóvenes son trasladados a nuevas áreas.

El reclutamiento en estas organizaciones empieza a edades tempranas, incluso desde los tres años, cuando los niños son vestidos con uniformes camuflados y brazaletes distintivos. Los adolescentes son más fácilmente captados a través de las redes sociales y en los entornos escolares, donde las disidencias aprovechan la vulnerabilidad y las dificultades económicas de muchas familias para atraer a las víctimas. Además, se estableció que, durante el actual gobierno, se ha observado un aumento en la incorporación de menores de edad en estas estructuras criminales, presentando este proceso de reclutamiento como “formación” y no como un acto de violencia forzada.


Compartir en