En entrevista exclusiva, un especialista en seguridad urbana revela los métodos más frecuentes de los delincuentes en Bogotá y ofrece recomendaciones para evitar ser víctima de estos delitos.
Con el incremento de la inseguridad en las calles de Bogotá, los ciudadanos se enfrentan diariamente a diversos tipos de robo que van desde el cosquilleo hasta el fleteo y el hurto en transporte público. En una entrevista exclusiva con Diario Extra, el experto en seguridad urbana, Carlos Fernández, detalla las modalidades de hurto más comunes en la ciudad y da consejos clave para estar alerta y protegerse.

Diario Extra: ¿Cuáles son las modalidades de hurto que más afectan a los ciudadanos en Bogotá?
Carlos Fernández: Sin duda, el robo en el transporte público y el cosquilleo son de los más frecuentes. Los delincuentes aprovechan la congestión en el sistema de TransMilenio, buses SITP y estaciones para hurtar sin que la víctima lo note de inmediato. Otra modalidad que está en aumento es el fleteo, donde los delincuentes siguen a personas que retiran dinero en efectivo de bancos o cajeros automáticos. Además, en las calles, el robo a mano armada en motocicleta sigue siendo una constante, sobre todo en horas pico.
Diario Extra: ¿Cómo operan los ladrones en el transporte público? ¿Es el TransMilenio un foco principal?
Carlos Fernández: Sí, TransMilenio es uno de los principales escenarios para el hurto, debido a la cantidad de personas que lo usan diariamente. Los delincuentes actúan en grupos, ubicándose estratégicamente para rodear a la víctima. Uno o dos de ellos la distraen, mientras otro sustrae el celular o la billetera en cuestión de segundos. Esta modalidad se conoce como “cosquilleo”. En ocasiones, también usan cuchillas para cortar bolsos o bolsillos y extraer las pertenencias sin ser detectados.
Diario Extra: ¿Qué es el fleteo y por qué es tan común en Bogotá?
Carlos Fernández: El fleteo es una modalidad peligrosa en la que los delincuentes identifican a personas que han retirado grandes sumas de dinero de bancos o cajeros automáticos y las siguen para asaltarlas. Generalmente, actúan en moto y en ocasiones usan armas para intimidar a la víctima. Este tipo de robo ocurre en distintas zonas de la ciudad, pero suele ser más frecuente en barrios comerciales o cerca de entidades bancarias. Se da con frecuencia en Bogotá debido a la falta de seguimiento y control en áreas comerciales y a la poca presencia de autoridades en estos lugares.
Diario Extra: ¿Qué medidas pueden tomar los ciudadanos para protegerse de estos robos?
Carlos Fernández: Lo primero es evitar transportar grandes sumas de dinero en efectivo. Si es necesario, pueden utilizar servicios de escolta bancaria, que son gratuitos en la mayoría de los bancos. En el transporte público, es importante mantener las pertenencias seguras y, si se lleva un bolso, que esté siempre cerrado y adelante del cuerpo. Además, es esencial estar atentos y no distraerse usando el celular en sitios públicos, sobre todo en paraderos o estaciones de TransMilenio.
Diario Extra: ¿Qué tan frecuente es el robo a mano armada en las calles?
Carlos Fernández: Lamentablemente, es muy común y afecta tanto a peatones como a conductores. En esta modalidad, los delincuentes, generalmente en moto, interceptan a sus víctimas y las intimidan con armas para exigirles que entreguen sus pertenencias. Suele suceder en semáforos y en sectores concurridos donde los ladrones saben que pueden escapar rápidamente.
Diario Extra: ¿Qué pueden hacer las autoridades para frenar estas modalidades de hurto?
Carlos Fernández: Las autoridades deben incrementar la presencia de policías en zonas críticas y reforzar las estrategias de vigilancia en el transporte público y en áreas de alta circulación de efectivo, como bancos y cajeros automáticos. También es importante mejorar la infraestructura de cámaras de seguridad y hacer campañas de concientización en la ciudadanía para que conozcan las medidas preventivas y sepan cómo actuar en caso de un intento de robo.
Diario Extra: ¿Un último consejo para los bogotanos?
Carlos Fernández: Sí, estar siempre alerta. Bogotá es una ciudad que, desafortunadamente, exige mucha precaución. Trate de evitar los desplazamientos con objetos de valor a la vista, guarde sus dispositivos y pertenencias de forma segura y confíe en su instinto. También, reporte cualquier incidente o situación sospechosa a las autoridades. La seguridad comienza con la prevención y la colaboración de todos los ciudadanos.
Esta entrevista revela la preocupación creciente por la inseguridad en Bogotá y destaca la importancia de que tanto ciudadanos como autoridades estén atentos y preparados para enfrentar este problema.
El hurto en Bogotá se dispara
Con un aumento del 30% en los casos de hurto en Bogotá durante el último año, concejales y ciudadanos claman por medidas contundentes que protejan a la ciudadanía. La inseguridad se ha convertido en el tema más preocupante para los habitantes de la capital.
Los casos de hurto en Bogotá no dejan de crecer, generando una sensación de inseguridad generalizada en barrios de todas las localidades. Según el último reporte de la Secretaría de Seguridad, en lo que va de año, los robos en la capital han aumentado un 30% en comparación con el año anterior, afectando tanto a peatones como a comerciantes y vehículos en zonas residenciales y comerciales. Las localidades más impactadas incluyen Kennedy, Suba y Chapinero, donde los habitantes han reportado sentir miedo constante al transitar las calles
La concejal Diana Diago alzó la voz ante el alarmante panorama, cuestionando el bajo porcentaje de inversión del presupuesto destinado a la seguridad. «Es inconcebible que, en medio de esta crisis, la Secretaría de Seguridad apenas haya ejecutado el 40% de su presupuesto de inversión en lo que va del año», manifestó Diago en una reciente sesión del Concejo de Bogotá. «Es nuestra responsabilidad proteger a los bogotanos, y el bajo uso de los recursos es una negligencia que no podemos permitir».
Otro concejal, Carlos Fernando Galán, señaló la falta de efectivos policiales como una de las causas del incremento en los hurtos. «Bogotá necesita, como mínimo, 5.000 policías adicionales para poder cubrir todas las zonas vulnerables de la ciudad. La inseguridad no discrimina sectores, y la ausencia de un pie de fuerza adecuado es aprovechada por las bandas criminales», afirmó Galán, quien también urgió a la alcaldía a mejorar los tiempos de respuesta ante emergencias.
Las estadísticas del Observatorio de Seguridad de Bogotá revelan que en el último semestre se han reportado más de 80.000 casos de hurto a personas, con el uso de armas en el 65% de estos eventos, lo que ha elevado la percepción de riesgo en la ciudadanía. Comerciantes y residentes se han unido para solicitar mayor presencia policial y la instalación de cámaras de seguridad en zonas críticas.
En respuesta, la Secretaría de Seguridad anunció un plan de refuerzo policial en localidades con altos índices de robo, además de la implementación de nuevas estrategias de vigilancia en conjunto con la Policía Metropolitana. Sin embargo, tanto concejales como ciudadanos coinciden en que estas medidas son apenas el inicio de lo que se requiere para mitigar la inseguridad en Bogotá.
El panorama de hurto en la capital está llevando a que muchos ciudadanos tomen medidas de autoprotección, como evitar salir a ciertas horas y limitar el uso de teléfonos y dispositivos en la vía pública. La ciudadanía espera acciones concretas y efectivas que garanticen la tranquilidad en las calles bogotanas, mientras que el Concejo de Bogotá se compromete a hacer un seguimiento riguroso a la ejecución de los recursos destinados a la seguridad.




