Este domingo 9 de noviembre de 2025, se confirmó por parte de la Ejército Nacional de Colombia el secuestro de cinco soldados profesionales en el municipio de Tame, en el departamento de Arauca, en la zona nororiental de Colombia.
Según los primeros reportes, los uniformados se desplazaban en transporte público (un bus interdepartamental) hacia la cabecera municipal de Arauca cuando fueron interceptados en la vereda Santo Domingo (zona rural de Tame) por un reten ilegal.
Durante ese reten los hombres armados obligaron a los soldados a descender del vehículo. Al parecer, se habla de cinco personas que bajaron del bus, pero fuentes preliminares indican que sólo cuatro de ellos son uniformados y el quinto podría corresponder a un civil.
Las cinco víctimas identificadas hasta ahora son los soldados profesionales: Andrés Felipe Muñoz Castro, Sergio Muñoz Zapata, César Muñoz Osorio, Luis Ángel Navarro Banquet y Daniel José Munive Sandoval. Todos están adscritos al Batallón de Combate Terrestre N.º 18.
El comando militar responsabiliza principalmente al Ejército de Liberación Nacional (ELN) como autor del hecho, en particular al frente conocido como ↓ Frente Domingo Laín Sanz, dada su fuerte presencia en la zona de Arauca junto con disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (FARC-EP) lideradas por alias “Iván Mordisco”.
Por su parte, la Defensoría del Pueblo emitió un pronunciamiento en el que exige la “liberación inmediata y sin condiciones” de los uniformados, advirtiendo que podría configurarse el delito de “toma de rehenes” si no se actúa con prontitud.
El incidente se da en un contexto ya marcado por la alta conflictividad en Arauca: entre enero y noviembre de 2025 se registraron 437 víctimas de secuestro en Colombia, de las cuales 133 fueron miembros de la Fuerza Pública (militares y policías).
Contexto de orden público
Arauca es un departamento estratégico en el conflicto armado interno colombiano, por su frontera con Venezuela, la presencia de corredores de cultivos ilícitos y la disputa territorial entre grupos armados ilegales. En esta región, el ELN y las disidencias de las FARC han venido desplegando acciones de control territorial, secuestro, retención de civiles y uniformados, y obstáculos al despliegue del Estado.
En el caso específico de Tame, la zona rural (como la vereda Santo Domingo y el sector conocido como “Flor Amarillo”) ha sido escenario de operaciones militares, retenes ilegales, y rutas vulnerables de transporte terrestre que los grupos armados aprovechan para emboscadas o secuestros.
Qué está haciendo el Estado
El Ejército Nacional activó inmediatamente los protocolos de búsqueda, colaboración con otras ramas de las Fuerzas Militares, la Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación, y desplegó operativos en el área para ubicar a los uniformados.
De igual modo, las autoridades recuerdan a la población civil la importancia de evitar transitar por zonas rurales sin escolta o aviso previo, y de privilegiar rutas aéreas o llamadas de control en zonas de alto riesgo —pues en este caso los soldados mismos tenían instrucción de trasladarse por vía aérea y sin embargo tomaron ruta terrestre.
Implicaciones
Este hecho tiene múltiples repercusiones:
- Pone en evidencia la persistente capacidad del ELN y de las disidencias de las FARC para realizar secuestros a personal militar, lo cual erosiona la seguridad del Estado y del personal uniformado.
- Amenaza la confianza en los corredores de transporte terrestre en zonas de alta conflictividad.
- Genera presión sobre el Gobierno Nacional y el Ministerio de Defensa para aumentar la presencia, inteligencia y protección en regiones fronterizas y rurales vulnerables.
- Podría complicar el avance de procesos de paz o negociaciones, pues la retención de uniformados se considera un acto de gravedad mayor.
- Afecta directamente a las comunidades locales, que sufren de presencia paramilitar o guerrillera, afectando su movilidad, economía y seguridad personal.
Lo que sigue
Las autoridades mantendrán operativos de búsqueda intensiva, zonas de alta movilidad serán monitoreadas, y se espera que el Gobierno Nacional emita un pronunciamiento oficial con mayores detalles del grupo responsable y las tácticas empleadas. También se contempla la activación de mecanismos de defensa, como helicópteros de apoyo, patrullajes mixtos de Fuerzas y cooperación internacional para localizar a los secuestrados.
La población de Tame y del departamento de Arauca permanece expectante ante la liberación de los soldados y exige una respuesta rápida y eficaz que evite que este tipo de hechos se vuelvan más comunes.




