El magistrado sostuvo que tanto el magnate como su defensa no han conseguido evidenciar que «no supone riesgo para nadie», especialmente para sus imputadas.
Este miércoles (02.06.2025), el ex magnate musical Sean «Diddy» Combs fue absolvido de las acusaciones de asociación ilícita y tráfico sexual. Sin embargo, el jurado lo halló culpable de tráfico de personas con fines sexuales.
Sus letrados habían solicitado su liberación bajo fianza a la espera del fallo, pero el juez lo rechazó.
Después de siete semanas de juicio y menos de dos días de deliberaciones, el representante del jurado, compuesto por ocho hombres y cuatro mujeres, comunicó al juez Arun Subramanian su fallo, que implica un triunfo para Combs y el equipo que le ha apoyado.
El jurado lo eximyó de las acusaciones principales, asociación ilícita y tráfico sexual, y lo halló culpable de dos cargos de trata con fines sexuales, lo que implica una pena de hasta 20 años de prisión, 10 por cada uno.
Aliviado, Combs, de 55 años, juntó sus manos como si estuviera rezando y las agitó repetidamente hacia el juez y el jurado en un gesto de gratitud. Después se reorientó hacia su familia, que durante el juicio le ha arropado y murmurado: «Voy a mi hogar».
Sin embargo, el juez ha anulado sus reivindicaciones. En un juicio realizado en la tarde del miércoles, Subramanian se negó a liberar a Combs, quien ha estado recluido desde septiembre pasado en un penal de Brooklyn, hasta que se pronuncie su veredicto, probablemente en octubre.
El magistrado sostuvo que tanto el magnate como su defensa no han conseguido evidenciar que «no constituye un riesgo para nadie», especialmente para sus acusadoras, y rememoró que en junio de 2024 tuvo lugar un incidente de violencia contra una expareja, en el que Combs se encontraba bajo investigación.
Además, rememoró que la defensa había admitido que el imputado ejercía violencia en sus interacciones sociales. «Esto demuestra un desdén hacia el estado de derecho y una inclinación hacia la violencia», alertó el magistrado. Los abogados de él habían ofrecido una garantía de un millón de dólares y ceder su documentación.
El fundador de la discográfica Bad Boy Records fue imputado por la fiscalía de forzar a dos exparejas, Casandra «Cassie» Ventura y una mujer que declaró con el nombre de «Jane», a sostener relaciones sexuales no deseadas con prostitutas, con el apoyo de sus empleados.
