El rapero y productor estadounidense Sean “Diddy” Combs enfrenta este viernes una jornada decisiva en los tribunales, donde un juez determinará si continuará en prisión o podrá recuperar la libertad bajo condiciones especiales.
Horas antes de la audiencia, Combs envió un mensaje en el que pidió clemencia y expresó su arrepentimiento: “Estoy arrepentido por el dolor que causé”, señaló, en referencia a los señalamientos que lo llevaron al banquillo de los acusados.
El artista, de 55 años, ha estado en el centro de la polémica por una serie de denuncias que marcaron un giro en su carrera. La sentencia de hoy podría definir no solo su futuro inmediato, sino también el rumbo de su legado artístico y empresarial.
Mientras tanto, seguidores y críticos esperan atentos el veredicto, que se prevé genere amplio impacto mediático en Estados Unidos y el mundo del entretenimiento.




