El alcalde de esta jurisdicción, Jhonnatan Patiño, ha sido vehemente en solicitar mayores gestiones para contrarrestar las acciones violentas que se presentan en el territorio y que afectan a la población civil.
Es preocupante la crisis humanitaria por el recrudecimiento de la violencia en Argelia, sur del Cauca, debido a que las confrontaciones armadas no se detienen, lo que hasta el momento ha generado desplazamientos, muertos y civiles heridos por minas, sin que hasta el momento haya intervención por parte de las entidades gubernamentales.
Enfrentamientos
Desde hace alrededor de un mes se han presentado enfrentamientos entre grupos armados organizados residuales, disidencias de las FARC y el ELN, así como con otras bandas criminales y también con tropas del Ejército que llegaron para asumir el control del orden público, en esa olvidada zona del Cauca.
Últimas horas
Durante el puente festivo se dieron nuevos choques armados, muriendo dos sujetos adscritos a la estructura Carlos Patiño de las disidencias de las FARC mientras que un grupo de campesinos que trató de intervenir para evitar que siga la guerra, ingresó aún campo minado resultando siete personas heridas, entre ellos un menor de edad.
Solicitud
Es por esto que un nuevo llamado al Gobierno Nacional y departamental del Cauca fue realizado por el mandatario local, Jhonnatan Patiño; “estamos pasando por una situación muy dura en nuestro municipio, campesinos inocentes están siendo víctimas en campos minados y general del conflicto. Como alcalde municipal quiero recordar que somos una autoridad civil administrativa, elegida por voto popular, nuestra posición, como el de las comunidades es totalmente neutra, nuestro mayor deseo es que pare la violencia y que todos los argelianos tengamos paz y tranquilidad”.
Críticas
Fuertes críticas ha recibido la Gobernación del Cauca, en especial a la Secretaría de Gobierno, en cabeza de Cornelio Angulo, porque a pesar de la difícil situación que se presenta en Argelia, desde la Gobernación solo rechazan los hechos, pero las acciones para contrarrestar este tipo de situación se han quedado cortas.
“Nuestro mayor deseo es que pare la violencia y que todos los argelianos tengamos paz y tranquilidad”.




