En horas de la tarde del pasado viernes 17 de enero, Ibagué se paralizó de nuevo con el primer suicidio del 2025 en la capital tolimense. Rafael Hernández de 60 años habría sido el hombre que tomó la fatal decisión por situaciones o inconvenientes que aún no son conocidos por sus familiares. El cadáver de Hernández fue hallado en la carrera Octava con calle 145, en el barrio El Salado, lugar al que llegaron unidades de criminalística de la Policía Metropolitana tras recibir el reporte del caso.
Impacto
El cuerpo fue trasladado al Instituto Forense de Medicina Legal para realizar la necropsia correspondiente. Aunque aún no se han detallado las causas de su deceso, los primeros indicios sugieren que Hernández podría haber sido hallado en un estado de suspensión. Sin embargo, esta versión no ha sido confirmada oficialmente por las autoridades, que continúan con las investigaciones para esclarecer las circunstancias de su muerte.
Preocupación
Por su parte, es de saberse que el suicidio es una problemática que continúa afectando profundamente a la ciudad de Ibagué, dejando una huella de dolor en las familias y la comunidad. Este fenómeno, ligado a factores como problemas de salud mental, dificultades económicas, aislamiento social y falta de acceso a apoyo psicológico adecuado, se ha convertido en una preocupación creciente para las autoridades locales y los ciudadanos.
Urgencia
En este contexto, el inicio del 2025 fue marcado por una trágica noticia: el señor Rafael Oswaldo Hernández se convirtió en la primera víctima de suicidio registrada en el año. Este lamentable hecho resalta la urgencia de fortalecer las estrategias de prevención, promover campañas de sensibilización y garantizar el acceso a recursos de salud mental en la ciudad. La pérdida de Rafael Oswaldo Hernández debe servir como un llamado a la acción colectiva para abordar esta crisis, salvando vidas y brindando esperanza a quienes enfrentan momentos de desesperación.
Condolencias
En este difícil momento, queremos expresar nuestras más sinceras condolencias a la familia y seres queridos de Rafael Oswaldo Hernández. Lamentamos profundamente su partida y acompañamos su dolor con el corazón lleno de solidaridad. Que encuentren consuelo en los recuerdos compartidos y la fortaleza para enfrentar esta pérdida irreparable. Estamos con ustedes en pensamiento y oración, deseando que la paz y el amor los rodeen en medio de esta tristeza. No están solos.




