Graciela Olaya Tijaro, quien se encontraba departiendo con un allegado, se acostó a dormir y sus allegados se llevaron una gran sorpresa cuando al día siguiente, no se levantó.
Luego al llamarla y moverla, ella no respondía y al tocarla se encontraron que no tenía signos vitales.
Había fallecido
Con el dolor acuestas, los familiares informaron de lo ocurrido a las autoridades de Policía, quienes remitieron los hechos la Unidad de Criminalística y a su vez realizaron el levantamiento del cuerpo.
Triste partida
Los restos mortales fueron trasladados a las instalaciones de Medicina Legal, donde efectuaron los trámites correspondientes.
Los allegados, se encontraban esperando la llegada de unos familiares que viven en otro departamento para la realización de las honras fúnebres.
Por redes sociales, escribió una allegada: “viajando a Neiva, con el corazón hecho pedazos”.




