Dos jóvenes que habían sido detenidos en medio de una fiesta en Buenaventura, los cuales estaban dedicados al fútbol, y quienes habían llegado de Medellín donde estaban concentrados, fueron dejados en libertad.
Día y noche, oraron por su libertad las madres de dos jóvenes que habían ido a una fiesta, y cuando ellos estaban a fuera sentados en el andén de una casa, llegó la Policía a requisar a los que estaban enrumbados en la vivienda de enseguida, sin embargo, al parecer uno de los que logró salir, dejó tirada un arma de fuego muy cerca de los muchachos, por lo que los policiales habrían dicho que ellos eran los que tenían el arma en su poder, y fueron llevados a juicio.
Sin embargo, estas madres de familia, demostrando que sus muchachos Yorlin Steven Arroyo y Ronaldo Angulo, no eran culpables de nada, y que solo eran dos deportistas que soñaban con estar en grandes ligas, siguieron pidiendo en la puerta de la cárcel su libertad, al igual que sus abogados, ya que las pruebas según ellas no eran suficientes para que los dejaran encerrados, hasta que se les dio el milagro en las últimas horas y fueron dejados en libertad.
Para la familia de los dos deportistas, se hizo justicia, pero hacen el llamado a que las autoridades hagan bien sus procedimientos y no afecten a los jóvenes que no tienen que ver con la inseguridad del municipio, y que sueñan con grandes logros para sus vidas mediante el deporte, la tecnología, la agricultura, entre otras.




