En medio de la implementación del Plan Cazador en Pitalito, las autoridades reportaron la captura de un hombre conocido con el alias de ‘El Rastro’, requerido por un juzgado de Popayán (Cauca) para cumplir condena por tentativa de hurto. El operativo se llevó a cabo en inmediaciones de la galería municipal, uno de los puntos más concurridos de la ciudad y donde, paradójicamente, los habitantes denuncian a diario robos, estafas y hechos de inseguridad.
El detenido, según las pesquisas, habría llegado recientemente desde el Cauca con la intención de ocultarse en Pitalito y evadir la acción de la justicia. Sin embargo, gracias al rastreo adelantado por uniformados, fue interceptado y posteriormente trasladado a un centro penitenciario para cumplir la condena que pesaba en su contra.
Seguridad
Aunque la Policía destacó este resultado como un avance en la lucha contra la delincuencia, la ciudadanía mantiene serias dudas. Para los comerciantes y compradores de la galería, la captura de un solo individuo no resuelve la ola de hurtos que los agobia desde hace meses. “Aquí todos los días roban, no solo celulares o billeteras, sino también productos y mercancías. El problema no es uno, son muchos”, expresaron con frustración varios locatarios.
El Plan Cazador ha sido presentado como una estrategia diferencial para recuperar la seguridad en sectores críticos de Pitalito, pero en la práctica muchos consideran que sus efectos son más mediáticos que estructurales. Mientras se difunden comunicados celebrando resultados puntuales, la sensación de zozobra persiste y el ciudadano común sigue expuesto a la delincuencia.
Un reto pendiente
El caso revela un trasfondo preocupante: Pitalito se ha convertido en refugio de delincuentes provenientes de otros departamentos, lo que evidencia fallas en el control territorial y en la articulación interinstitucional. Para algunos líderes comunitarios, más que operativos intermitentes, se requieren políticas de seguridad sostenibles, con mayor pie de fuerza, cámaras de vigilancia efectivas y programas sociales que ataquen de raíz las causas del delito.
La captura de alias ‘El Rastro’ demuestra que el Plan Cazador puede arrojar resultados, pero también pone en evidencia las limitaciones de una estrategia que parece enfocarse en golpes aislados sin transformar la realidad de inseguridad que aqueja al municipio. La comunidad exige pasar del anuncio a la acción integral: menos titulares y más soluciones de fondo.