En el municipio de Silvia, Cauca, se registraron enfrentamientos entre las disidencias de las Farc y el ELN, concentrados en el territorio indígena de Tumburao. Según las autoridades locales, la población civil permanece confinada debido a la creciente inseguridad. En el marco de los combates, las disidencias se posicionaron en la vivienda de un adulto mayor, poniendo en grave riesgo a los habitantes. El Ejército Nacional, a través de la Tercera División, desplegó tropas para recuperar el control de la zona, donde también se han reportado choques directos entre los militares y los grupos armados ilegales.
De acuerdo con el brigadier general Federico Mejía, comandante de la Tercera División, la violencia en Silvia estaría motivada por la disputa entre los grupos armados por el control de las rutas para el tráfico de marihuana producida en la región. Este tipo de cultivos ilícitos se ha convertido en un motor de conflicto en el departamento, donde la población civil enfrenta las consecuencias de las pugnas territoriales.
Por otra parte
En el casco urbano del municipio de Argelia, un ataque con motobomba contra una patrulla militar dejó cinco personas heridas, entre ellas dos soldados y tres civiles de la tercera edad. El incidente ocurrió mientras los uniformados escoltaban un traslado de dinero correspondiente a los recaudos del Banco Agrario. Las autoridades sospechan que los atacantes asumieron que los militares transportaban el dinero, lo que habría motivado el atentado.
Los heridos, incluidos los civiles, fueron trasladados a un centro asistencial de la zona, donde reciben atención médica. Las autoridades locales condenaron los hechos violentos y anunciaron investigaciones para identificar a los responsables. Mientras tanto, la población del Cauca continúa viviendo bajo la amenaza de los enfrentamientos entre grupos armados, en medio de una crisis de seguridad que afecta gravemente a la región.



