En Haití, la inestabilidad política volvió a intensificarse tras la sorpresiva renuncia de Michel Patrick Boisvert, primer ministro provisional, quien apenas llevaba dos meses en el cargo. Boisvert declaró que no existen las garantías mínimas para liderar un proceso de transición democrática, ante el avance de las bandas armadas que controlan Puerto Príncipe.
Estados Unidos y la Comunidad del Caribe (Caricom) han expresado preocupación por el vacío de poder. La población, mientras tanto, sufre el colapso de los servicios básicos y la inseguridad rampante. Se prevé que la Misión Multinacional liderada por Kenia desembarque en los próximos días para apoyar en labores de estabilización.
