Un ataque mortal golpea el oeste de Ucrania
Rusia lanzó una andanada de misiles y drones contra varias ciudades ucranianas el miércoles, dejando al menos 25 muertos y 73 heridos en Ternopil.
Un misil impactó un edificio residencial y destruyó los tres últimos pisos, informaron los servicios de emergencias.
Equipos de rescate buscaban sobrevivientes entre los escombros mientras sacerdotes rezaban junto a los cuerpos de las víctimas.
Residentes dijeron que el ataque destruyó la sensación de seguridad en una región que hasta ahora había sufrido pocos bombardeos.
Los ataques coinciden con los esfuerzos diplomáticos de Zelenski
El bombardeo ocurrió cuando Volodímir Zelenski visitaba Turquía para intentar reactivar conversaciones de paz estancadas desde hace meses.
El presidente afirmó que Rusia lanzó 470 drones y 48 misiles, golpeando infraestructura energética, de transporte y áreas civiles.
Autoridades ucranianas indicaron que no hay negociaciones directas con Rusia desde el verano.
Las conversaciones en Turquía ocurren en medio de propuestas elaboradas entre Moscú y enviados del gobierno estadounidense sin consultar previamente a Kiev.
Washington busca destrabar el diálogo
Una delegación militar de alto nivel de Estados Unidos llegó a Kiev para reunirse con Zelenski y evaluar nuevos caminos diplomáticos.
El secretario del Ejército, Daniel Driscoll, lidera la misión, acompañado por dos generales de cuatro estrellas.
El gobierno estadounidense cree que Moscú podría responder mejor a negociaciones lideradas por mandos militares.
No está claro si Driscoll lleva una propuesta formal, pero informará a la Casa Blanca sobre los avances.
También discutirá la situación en el campo de batalla y la producción de armamento ucraniano.
La ofensiva rusa aumenta la presión regional
Los ataques incrementaron la tensión en países vecinos.
Rumania desplegó cazas tras detectar la incursión de un dron ruso en su territorio.
Polonia y otros miembros de la OTAN también movilizaron aviones para proteger su espacio aéreo.
Zelenski aseguró que los recientes ataques muestran que la presión internacional es insuficiente para frenar a Moscú.
Pidió más apoyo militar mientras Ucrania continúa usando sistemas ATACMS para atacar posiciones rusas.
Una guerra sin señales de resolución
Con Pokrovsk cerca de caer en manos rusas y un escándalo político que debilita al gobierno ucraniano, las negociaciones parecen cada vez más complejas.
Kiev teme que Moscú intente imponer términos favorables aprovechando la inestabilidad.
Pese al esfuerzo diplomático, los últimos ataques refuerzan la percepción de que la guerra está lejos de terminar.
