Justicia rusa impone dura pena a colombiano que combatió con Ucrania
Rusia ha condenado a 14 años de prisión al colombiano Óscar Hoyos Alzate. El fallo se debe a su participación en el conflicto armado del lado de Ucrania.
La sentencia incluye también al ciudadano francés Sylvain Bernard Caupin. Ambos fueron considerados culpables de actuar como mercenarios en la guerra.
Según el Comité de Investigación de Rusia, ambos fueron capturados por combatir contra tropas rusas desde 2023. Lo hicieron, presuntamente, a cambio de dinero.
Serán enviados a prisión de máxima seguridad
El tribunal militar ordenó que Hoyos Alzate y Caupin cumplan su pena en una cárcel de máxima seguridad. Las autoridades señalaron que hay pruebas suficientes para su condena.
El comunicado oficial confirmó que los sentenciados figuran ahora en la lista de busca y captura del Gobierno ruso. Además, se han emitido órdenes de arresto internacionales.
Rusia los acusa de haber integrado grupos armados extranjeros que combaten en el frente ucraniano, en violación de las leyes rusas sobre mercenarismo.
Casos similares se acumulan en tribunales rusos
Esta no es la primera vez que Rusia condena a combatientes extranjeros capturados en el conflicto. El 16 de julio, otro tribunal militar sentenció a 24 años de prisión al paraguayo Jorge Adrián Lugo Jiménez.
Lugo Jiménez también fue acusado de participar en acciones militares contra tropas rusas. Su condena ha generado preocupación por el trato que reciben los prisioneros de guerra extranjeros en Rusia.
Las autoridades rusas han advertido que cualquier extranjero que participe en el conflicto será tratado como criminal y no como combatiente legal bajo normas internacionales.
Crece la tensión internacional por condenas a extranjeros
Organismos de derechos humanos y gobiernos occidentales han expresado preocupación por estas condenas. Consideran que Rusia vulnera el derecho internacional al tratar a los prisioneros como mercenarios.
Ucrania ha reiterado que muchos de los combatientes extranjeros operan bajo acuerdos formales con sus fuerzas armadas, por lo cual deberían ser protegidos por el derecho humanitario.
Sin embargo, Rusia sostiene que estos individuos no tienen estatus legal y que sus acciones constituyen delitos bajo su legislación penal.
La participación extranjera en la guerra sigue creciendo
Desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania en 2022, miles de combatientes extranjeros se han unido a las filas ucranianas. Lo han hecho por motivos ideológicos, humanitarios o económicos.
El caso del colombiano Óscar Hoyos Alzate reaviva el debate sobre el papel de ciudadanos latinoamericanos en conflictos fuera de su país. Su participación puede acarrear graves consecuencias legales.
Mientras tanto, Rusia continúa reforzando su narrativa legal para justificar la criminalización de todos los combatientes no rusos capturados en la zona de guerra.
