Autora: Daicy Echeverri.
Cuando cumplimos años y a medida que pasa el tiempo, en vez de estar felices y celebrar, la fecha se convierte en un motivo de preocupación por la aparición de los signos de edad; como por ejemplo, acentuación de las líneas de expresión, predominancia de ojeras acompañadas de los temibles parpados caidos. El resultado: un rostro cansado.
La mirada transmite más de lo que parece. Ni siquiera un buen maquillaje puede ocultar la pérdida de firmeza de la piel que rodea los ojos. Y en las fotos se notan aún más con las sombras generadas en tu cara. Acá es cuando, tanto mujeres como hombres guardan en común, su deseo de recuperar frescura en el contorno ocular.
En Colombia la condición notoria de la caída ligera del párpado superior, se ha convertido en un motivo frecuente de consulta estética, la misma, transmite una apariencia de mirada apagada, aunque la persona descanse bien. En este punto, se cree que una cirugía es la mejor opción, pero los tratamientos no quirúrgicos ofrecen alternativas transformadoras sin necesidad de recurrir al bisturí, y pueden rejuvenecerte y aportar lozanía al rostro.
¿Por qué ha crecido la demanda en Colombia?
Las cifras recientes confirman que el país, se mantiene como uno de los epicentros más grandes de la estética en América Latina. Según el informe de la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética, se realizaron 169.536 procedimientos no quirúrgicos en el 2024.

Dentro de los cuales, el 43 % correspondió a aplicaciones de toxina botulínica y el 25 % a ácido hialurónico, mientras que el restante se distribuyó entre micropigmentación, bioestimuladores e hilos tensores. Si lo comparamos con el 2023, la tendencia fue al alza con un 10% de aumento en la demanda. Consolidándose como uno de los destinos más solicitados por pacientes nacionales y extranjeros que buscan rejuvenecer su rostro sin entrar a cirugía.
La popularidad en el mercado de estas opciones, refleja un cambio cultural, en donde incluso los hombres también quieren tratamientos para suavizar su expresión, y se ha vuelto parte de la rutina para ambos géneros, sin importar si tienen una edad avanzada, este proceso se anticipa y previene.
4 tratamientos no quirúrgicos que sí funcionan
1. Toxina botulínica o bótox
En Colombia su aplicación lidera los procedimientos no invasivos, y consiste en relajar los músculos responsables de las líneas de expresión, como la frente, el entrecejo, contorno de ojos y comisura de los labios. Al reducir la tensión de esas zonas, se genera un efecto visual de cejas ligeramente elevadas y mirada más abierta, contribuyendo a mitigar el efecto de los párpados caídos y la mirada cansada.
2. Ácido hialurónico y rellenos suaves
Es segundo lugar en demanda. Se usa para recuperar volumen en surcos faciales o áreas que con el tiempo se hunden, como debajo del párpado o en la mejilla lateral. El resultado: sombras disminuidas y contorno definido.

3. Tecnología y tensado dérmico
Procedimientos tales como radiofrecuencia, ultrasonidos focalizados o hilos tensores ganan cada vez mayor protagonismo para mejorar el contorno ocular. En investigaciones, se menciona que la combinación de estas técnicas permite elevar la ceja, tensar el párpado y restaurar luminosidad sin recurrir a cirugía.
4. Enfoque integral: estética + buenos hábitos
El tratamiento estético da un cambio visible casi inmediato, pero una mirada revitalizada también depende de rutinas saludables. Dermatólogos advierten que dormir menos de 6 horas, fumar, no usar protector, consumir alcohol en exceso y no tomar suficiente agua, aceleran los signos de fatiga reflejados en los ojos y el rostro en general.
El uso riguroso de bloqueador solar, y la aplicación de cremas humectantes, además, hidratación frecuente; reducen considerablemente la aparición de bolsas en el contorno ocular y flacidez facial.
Lo recomendable es construir un cuidado constante con tratamientos que rejuvenecen y rutinas que los preservan o alargan el resultado en el tiempo. Así que lo importante no es esconder la edad, sino al contrario celebrar cada año con orgullo reflejando la vitalidad, frescura y confianza en tu apariencia.

