La adaptación de Cien años de soledad en Netflix ha generado un gran debate y aplausos por su representación innovadora de la belleza. La actriz Akima, quien interpreta a Rebeca, ha sido elogiada por su papel en la serie, que rompe con los estereotipos tradicionales de belleza que suelen dominar las pantallas.
En la obra original de Gabriel García Márquez, Rebeca es descrita como una de las mujeres más bellas, lo que generó expectativas sobre su representación en la serie. Sin embargo, la decisión de casting de Akima, una actriz con rasgos afro e indígenas, ha sido aplaudida por muchos como un reflejo más auténtico de la diversidad colombiana.
Akima respondió a las críticas a través de un video, destacando la importancia de esta representación: «Se me hace súper valioso que estemos exportando otro tipo de caras al mundo». La actriz subrayó que Colombia es un país lleno de diversidad, algo que la producción ha logrado capturar en pantalla.
La adaptación de Cien años de soledad no solo revive la historia icónica de García Márquez, sino que también abre una conversación sobre la inclusión y la redefinición de la belleza en el mundo audiovisual. La representación de Rebeca es un paso importante hacia la diversidad y la inclusión en la industria del entretenimiento.



