El concejal Roberto Ortiz se pronunció desde la plazoleta Jairo Varela sobre el proceso de elección del nuevo contralor distrital de Cali, haciendo un llamado enfático a la independencia y la transparencia. Según Ortiz, este cargo no puede estar al servicio de intereses políticos, sino al de la ciudadanía, porque su papel es vigilar el uso correcto de los recursos públicos.
“El contralor no puede estar amangualado con el alcalde ni con la gobernadora”, advirtió el cabildante, recordando que el control fiscal debe ser una herramienta de vigilancia y no de complicidad. Ortiz insistió en que los caleños exigen funcionarios que actúen con ética, sin compromisos partidistas ni presiones externas.
El concejal también cuestionó la manera en que algunos sectores políticos estarían intentando influir en la elección, lo que —dijo— pondría en riesgo la credibilidad del órgano de control. “Si el Concejo no actúa con responsabilidad, la ciudad podría quedar sin una verdadera fiscalización de los recursos distritales”, expresó.
Finalmente, Ortiz reiteró que su compromiso es con la transparencia, la rendición de cuentas y la defensa del dinero público, subrayando que la confianza de los ciudadanos en las instituciones depende de la rectitud con que se elijan los nuevos contralores.
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