Quince años después de la trágica muerte de Steve Irwin, su hijo Robert protagonizó un momento profundamente simbólico al alimentar al mismo cocodrilo que su padre enfrentó años atrás en el Zoológico de Australia. La escena, que rápidamente se viralizó en redes sociales, fue replicada lado a lado con la original, dejando ver no solo el parecido físico entre ambos, sino la misma determinación, respeto y amor por la vida salvaje.
Robert, hoy con 20 años, creció en medio del legado que dejó su padre, reconocido mundialmente como el “Cazador de Cocodrilos”. Desde muy joven, ha estado involucrado en el cuidado de animales y en la promoción de la conservación, siguiendo los pasos de Steve con admirable compromiso.
“Es un honor continuar lo que él empezó. Cada vez que entro en esta zona del zoológico, siento su presencia”, expresó Robert en una entrevista reciente, visiblemente conmovido.
El gesto no solo fue visto como un homenaje, sino como una prueba tangible de que el legado de Steve Irwin está más vivo que nunca. A través de su hijo, su mensaje sobre la importancia de proteger y respetar la naturaleza sigue tocando corazones en todo el mundo.
