En una noche llena de caos y temor, el corresponsal JER, ubicado en la carrera 11 entre calles 13 y 14, en el centro de Sogamoso, fue escenario de un violento robo que ocurrió alrededor de las 9:30 p.m. del 9 de julio. Aproximadamente cinco individuos armados llevaron a cabo el asalto, dejando un saldo preocupante tanto en términos financieros como de seguridad.
Armando Santos, quien se encontraba en el establecimiento como cliente en el momento del ataque, relató que los asaltantes entraron de forma abrupta y agresiva. Según su testimonio, los delincuentes golpearon al vigilante del local y encañonaron a los empleados que estaban presentes, generando una situación de pánico generalizado. Santos, quien vivió el incidente en carne propia, aseguró que la violencia y el temor se apoderaron del lugar durante los angustiosos minutos que duró el asalto.
El impacto económico del robo es considerable; se estima que los delincuentes sustrajeron una cifra superior a los 200 millones de pesos. Este monto elevado ha causado una gran preocupación tanto entre los ciudadanos como entre las autoridades locales, que se enfrentan a un desafío significativo en la búsqueda de los responsables.
Tras el asalto, las autoridades activaron de inmediato un «plan candado» en toda la ciudad para rastrear a los delincuentes y evitar su fuga. Este operativo implica un control exhaustivo de las salidas y entradas de la urbe, así como un incremento en la vigilancia para capturar a los culpables lo antes posible.
El vigilante, quien aún no ha sido identificado, sufrió graves lesiones durante el ataque. Fue trasladado al hospital local después de que uno de los delincuentes le golpeara en la cabeza con la cacha de un revólver, causándole una herida considerable. Su estado de salud es estable, pero permanece bajo observación médica para asegurar una adecuada recuperación.
Por su parte, las autoridades están revisando las grabaciones de las cámaras de seguridad del corresponsal y recopilando testimonios de los testigos para reconstruir los eventos y avanzar en la identificación de los asaltantes. Asimismo, se están evaluando posibles conexiones entre estos delincuentes y otros actos delictivos en la región.