Un caso de intolerancia se vivió en zona rural del centro poblado de la Ulloa en donde se vieron involucradas algunas personas que al calor de los tragos empezaron a discutir.
El suceso
La femenina agredida al parecer le reclamó a una vecina porque desde el día anterior estaban ingiriendo bebidas alcohólicas y escuchando música en alto volumen, por lo que su familia no había podido tener un momento de tranquilidad por la bulla generada en esa vivienda.
La agresora omitió los reclamos no sin antes subirle el volumen al parlante en el que sonaba la música. Por segunda vez le suplicaron por algo de tranquilidad, ya que en esa zona habitan adultos mayores y niños, pero la mujer, en alto estado de embriaguez, se acercó la vivienda a lanzar improperios y groserías y ante el reclamo de Mildred, ésta le lanza un puño en la cara.
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De inmediato salieron los moradores de la zona a intentar calmar los ánimos, puesto que no es la primera vez que esto ocurre y siempre tiene que haber alguna intervención por parte de las autoridades locales. En este caso sus respectivos esposos intermediaron para detener la agresión mutua.
Los antecedentes
Según información extraoficial, el pleito entre estas dos familias de origen venezolano no es algo nuevo ya que desde hace más o menos un año que habitan la zona, se han presentado inconvenientes de este tipo. Alto volumen e ingesta de licor que siempre termina en pleito.
Las autoridades hacen un llamado a la tolerancia y al respeto. Hay que apelar a los mecanismos de dialogo contemplados en el código nacional de seguridad y convivencia ciudadana para la solución de posibles conflictos y discrepancias entre las personas.
Pie de foto: Mildred Rocío Salazar, agredida.
