La sesión que se realizó virtualmente, inició con un ‘agarrón’ entre Romero y la Corte Suprema, luego de que el alto tribunal negara una petición de suspensión que hizo Ruth Marina Pulido, defensora pública que representa al exmandatario hace unas semanas. Ella argumentó que no ha podido conocer todo el expediente.
La Sala de Primera Instancia dijo que, si bien hubo días en que Pulido no tuvo contrato con la Defensoría del Pueblo, desde el 6 de diciembre de 2021 a la fecha transcurrió tiempo suficiente para conocer los términos de la imputación, y la acusación que le hizo la Fiscalía a Romero, así como las decisiones que se tomaron en la audiencia preparatoria.
No siente garantías
Luego que la Corte negara la petición, Camilo Romero tomó la palabra para decir que su abogado de confianza, que había llevado el caso durante cuatro años, renunció «por no sentir garantías. Me quedo sin abogado no por decisión mía, sino por cómo ha venido actuando la Corte Suprema de Justicia», expresó.
«¿Cuáles son las garantías que tenemos quiénes nos hemos opuesto a un régimen de corrupción en Colombia? La tranquilidad que yo sentía ante la Corte Suprema de Justicia hoy queda reevaluada”, señaló Romero.
Participó en debate
El exgobernador le quitó el poder a la defensora pública que le asignó la Sala Especial de Primera Instancia. Esto condujo a un receso de la diligencia, tiempo aprovechado por Romero, para empezar su participación en un foro de diez aspirantes a la presidencia, a pesar de estar en la indagación ante la Corte.




