La comunidad del barrio Santa Mónica, ubicado en la Comuna Tres de Pasto, ha lanzado una voz de alerta ante la creciente vulnerabilidad de los jóvenes en la zona. Según denuncian sus habitantes, la falta de oportunidades, espacios deportivos adecuados y programas de acompañamiento está dejando a muchos adolescentes expuestos a la delincuencia, el consumo de drogas y otras problemáticas sociales.
Fabio Díaz, líder barrial y vocero de la comunidad, ha hecho un llamado directo a las autoridades locales, especialmente al Instituto Pasto Deporte, para que no olviden a los sectores más alejados del centro y activen programas que incentiven el amor por el deporte desde la infancia.
Formación
«El deporte puede salvar vidas, pero necesitamos apoyo», enfatizó Díaz. «Nuestros jóvenes tienen talento, tienen ganas, pero no tienen campeonatos, ni escuelas de formación gratuitas, ni canchas en condiciones dignas. Si no intervenimos con urgencia, los perdemos», agregó.
El dirigente plantea la creación de torneos comunitarios, brigadas deportivas los fines de semana, y el acompañamiento de entrenadores y formadores en los distintos barrios de la comuna. También pide una intervención urgente para recuperar y dotar los espacios públicos que hoy se encuentran abandonados o inseguros.
El llamado de Santa Mónica no es solo una solicitud de recursos, sino una advertencia sobre la necesidad de actuar antes de que sea tarde. “No podemos seguir improvisando con los jóvenes. Si no les damos caminos sanos para crecer, otros caminos más peligrosos los atraparán”, sentenció Díaz. Los habitantes esperan que esta solicitud no caiga en el olvido y se convierta en una oportunidad para que el deporte deje de ser un privilegio en algunos sectores, y se transforme en un derecho garantizado para todos los niños y jóvenes de Pasto.