La Asociación de Juntas de Acción Comunal del municipio de Cartagena del Chairá, Caquetá, alzó su voz con firmeza para reprochar las constantes amenazas dirigidas contra líderes comunitarios y presidentes de juntas, quienes vienen siendo blanco de intimidaciones en medio del actual recrudecimiento de la violencia en la región. Las intimidaciones han generado un ambiente de miedo y zozobra entre las comunidades, especialmente en zonas rurales, donde los actores armados ilegales ejercen presión sobre las organizaciones sociales.
Los líderes comunales denuncian que la situación se ha agravado en las últimas semanas, al punto que varios de ellos se han visto forzados a restringir sus actividades o incluso desplazarse por razones de seguridad. “No podemos seguir callando mientras nuestros líderes son amenazados por ejercer su labor. Pedimos acciones contundentes del Estado”, expresaron en un comunicado oficial.
Exigencia
La Asociación, bajo la dirección de Arístides Oime de Asojuntas de Cartagena del Chairá, ha solicitado con carácter urgente la intervención de la Defensoría del Pueblo, la Unidad Nacional de Protección (UNP) y demás instituciones encargadas de salvaguardar la integridad de los líderes sociales en Colombia. Instan a que se activen de manera inmediata las rutas de atención, con medidas de protección colectivas e individuales que permitan reducir el riesgo al que se enfrentan quienes desempeñan labores comunitarias esenciales.
“Exigimos presencia institucional, que se escuche a las comunidades y se proteja a quienes están siendo amenazados por defender los derechos de sus vecinos y promover el desarrollo de sus territorios”, señaló.
Contexto
Cartagena del Chairá ha sido históricamente una de las zonas más golpeadas por el conflicto armado en el sur del país. En la actualidad, la presencia de grupos armados ilegales, entre ellos disidencias de las FARC, mantiene en constante tensión a la población civil, especialmente a quienes tienen roles de liderazgo.
Según líderes comunales, las amenazas se han materializado a través de llamadas anónimas, panfletos y seguimientos, hechos que ya han sido puestos en conocimiento de las autoridades, pero que hasta el momento no han generado acciones contundentes.
Alerta
La situación ha despertado preocupación no solo en Cartagena del Chairá, sino también en otros municipios del Caquetá, donde las juntas de acción comunal cumplen un rol clave en la organización social y la canalización de proyectos comunitarios.
La Asociación reiteró su llamado al Gobierno Nacional para que garantice condiciones de seguridad dignas para los líderes sociales, y recordó que, sin garantías para la vida, no es posible construir paz en los territorios más afectados por la violencia.
