El volumen de atracción e interés global por Medellín que se ha acelerado en los últimos dos años es un fenómeno que, si bien tiene que ver con condiciones originales del territorio, como su agradable clima, su geografía o la calidez de su gente, también es consecuencia de un proceso de transformación del relato de la ciudad, ahora asociado a la resiliencia, el progreso y la prosperidad para vivir.
En Comfama estamos convencidos de la importancia de juntarnos para conversar, proponer y entregar diversas miradas ante los grandes desafíos, en este caso los que surgen a raíz de la llegada de cada vez más visitantes y residentes a Medellín. Por ello, con aliados como Vivir en El Poblado, Proantioquia, Tax Indivudal y EAFIT, propiciamos el pasado 5 de julio un espacio para el diálogo y la escucha de distintos actores involucrados en este fenómeno. Inquietudes, experiencias, dolores y miradas de esperanza surgieron para concluir la importancia de trazar una ruta integral que permita incorporar este apogeo de nuevos visitantes y residentes en la cotidianidad de la ciudad de una forma armoniosa y planificada.
Estos fueron algunos de los mensajes e ideas principales que le dieron forma a la conversación:
- “Este fenómeno no es nuevo. En España, en México y en otros países se ha dado con especial intensidad, pero en ninguna parte con la rapidez y el impacto que se ha dado en Medellín. Podemos aprender de otros fenómenos, pero tenemos un contexto y una dimensión distinta. El reto que tenemos hoy es situarlo y rodearlo de rigurosidad para entender mejor los desafíos, la complejidad y las oportunidades”. Alejandro Echeverri.
- “¿Cómo deberíamos preparar a la ciudad para este proceso? Hay que hacer un diagnóstico desde diferentes capas y sectores para identificar los cambios, beneficios y retos que tenemos. Al gobierno les corresponde unas respuestas; a los sectores turísticos, otras; a la academia, al sector inmobiliario también. Lo peor que podemos hacer con esta situación es simplificarla. Es con datos reales es que tomamos decisiones correctas”.
Alejandro Echeverri.
- “Desde mi visión como extranjera, creo que adelantar iniciativas para enseñar inglés en sectores como el de la salud, entretenimiento y hotelero es fundamental para aprovechar el momento que vive Medellín. Unos años atrás, desafortunadamente, Colombia era sinónimo de violencia o narcos en el extranjero. Hoy es un país atractivo y causa mucha curiosidad por su cultura, sus artistas, su música y su territorio”. Rachel Orozco.
- “Como Junta de Acción Comunal ya estamos haciendo pilotos para engranar e incentivar la cultura ciudadana de quienes vengan a quedarse en la ciudad, para que también cuiden a Medellín. Lo estamos haciendo, apoyándonos en plataformas digitales y al mismo tiempo vinculando a los empresarios, vecinos y todos los sectores posibles”. José Fernando Álvarez.
- “Es necesario aprender del extranjero, abrazarlo y no tenerlo en cuenta solo para cobrarle. El extranjero nos puede enseñar mucho desde lo urbano, ellos llegan con ideas, otra visión y en ocasiones capital para invertir en proyectos”. Diego Restrepo Isaza.
- “Todos somos nómadas por naturaleza. Todos llevamos sangre de nuestros antepasados y la naturaleza de la sociedad contemporánea nos pone en la misma condición de, en cualquier momento, trasladarnos a otro lugar”. Diego Restrepo Isaza.
- “Si uno no tiene pasión, no se puede discutir. Este debate debe ser apasionado, pero también argumentado. Solo tenemos signos, ideas e intuiciones, pero no diagnósticos. Con ellos como base podremos diseñar políticas públicas para los habitantes y no solo para los sectores económicos y para los intereses de la turificación.” Luis Fernando González.
- “No es lo mismo turismo que nomadismo y migración. Es clave separar estos conceptos para atacar las problemáticas con un enfoque y así plantear soluciones realmente efectivas. Es necesaria la educación como ciudad y el control positivo. Hay que aplicar criterios de sostenibilidad reales”. Luis Fernando González.
- “Esta discusión es el primer paso de un tema que estaba siendo tabú. Vemos dos ciudades: la ideal, la que se vende, y luego el centro y otros barrios que viven deshabitación y abandono. Es el momento de intervenir, reflexionar y crear más escenarios sobre este asunto para poder hacer un diagnóstico que integre todos los fenómenos”. Leonardo Constantino Ramírez, asistente al foro.
Como hemos mencionado, este ejercicio fue solo un punto de partida para una discusión diversa, transparente pero que debe seguir dándose. No es aún momento de llegar a conclusiones o respuestas definitivas. Hemos abierto el diálogo con el propósito de que cada uno de los actores que estamos involucrados reflexionemos, dispongamos nuestra capacidad y las herramientas de análisis correspondientes para estudiar, entender, sustentar con datos y cifras los hallazgos, y finalmente entregar un diagnóstico preciso en el que conjuntamente nos basemos para articular propuestas y soluciones.




