Iris Marín a Petro y el Congreso: preservar presupuesto de Defensoría es urgente

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Bogotá, 2 de septiembre de 2025. La Defensoría del Pueblo de Colombia expresó hoy su profunda preocupación por la propuesta del Gobierno y el Congreso de recortar entre un 3 % y un 9,7 % su presupuesto para 2026, alegando que esta reducción afectaría dos de sus pilares fundamentales: el Sistema de Alertas Tempranas (SAT) y la atención a víctimas de violencia de género. Según la entidad, los fondos destinados a “inversión”, esto es, aquellos para ampliar sus capacidades operativas, podrían verse reducidos hasta en un 30 %.

La defensora del Pueblo, Iris Marín, denunció que esta decisión se propone en medio de un contexto crítico: aumento de la violencia armada, desplazamientos forzados, reducción de cooperación internacional y las elecciones de 2026 como escenario de tensión.

Human Rights Watch (HRW) también alzó la voz, indicando que este recorte pondría en riesgo funciones esenciales como la observación electoral, la protección de defensores de derechos humanos, y el monitoreo de amenazas a comunidades vulnerables. Desde su perspectiva, Colombia atraviesa un momento de fragilidad institucional que demanda fortalecer, no debilitar, la Defensoría.

La alerta ha sido respaldada por organismos internacionales como la ONU, reforzando la idea de que una Defensoría debilitada limitaría la capacidad del Estado de reaccionar ante violaciones de derechos humanos en territorios afectados por la violencia estructural.

La Defensoría del Pueblo fue creada en 1991 como un órgano constitucionalmente autónomo dedicado a la promoción y defensa de los derechos humanos en Colombia. Su rol es especialmente estratégico en regiones donde la presencia del Estado es limitada y los riesgos para la población civil son constantes.


Contexto relevante

  • Violencia en aumento: En el primer semestre de 2025, el desplazamiento forzado, confinamientos, homicidios y secuestros registraron aumentos importantes, mientras que defensores de derechos humanos continúan siendo uno de los grupos más atacados.
  • Cercanía a un ciclo electoral explosivo: Las elecciones legislativas y presidenciales de 2026 se acercan en un escenario ya marcado por asesinatos de candidatos y posibles riesgos para la democracia.
  • Debilidad en cooperación internacional: Agencias como la ONU y USAID han reducido operaciones en zonas críticas, lo que deja a la Defensoría como uno de los pocos actores con capacidad de monitoreo efectiva.

Datos clave

ElementoDetalle
Reducción propuesta3 % en presupuesto general; hasta 30 % en recursos de inversión
Déficit estimadoUSD 32,3 millones, equivalente a 9,7 % menos de lo necesario
Áreas afectadasSistema de Alertas Tempranas, atención a víctimas de violencia de género, monitoreo electoral, protección de defensores
Actores críticosDefensoría del Pueblo, Human Rights Watch, ONU
Contexto adversoViolencia creciente, crisis humanitaria, elecciones 2026, deterioro de cooperación internacional

Datos finales importantes

  • La Defensoría del Pueblo desempeña un papel esencial en la protección de los derechos humanos en Colombia desde su creación en 1991 como órgano autónomo y constitucional.
  • En una coyuntura marcada por tensiones armadas, desplazamientos y elecciones, los recursos de la entidad se cuentan entre los pocos instrumentos estatales de prevención y atención inmediata.

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