En la mañana de este 1 de julio trascendió una nueva hipótesis de la tragedia ocurrida el pasado martes 28 de junio en la cárcel de Tuluá, Valle y en la que fallecieron más de 50 presos y la cual indica que al menos 30 de las víctimas mortales habrían sido asesinadas con arma blanca, inclusive con arma de fuego, horas antes de iniciarse la conflagración.
Yesenia González Tascón, esposa de Jonathan Sabogal, uno de los internos que fallecieron al interior de la cárcel y oriundo de Bugalagrande, afirmó que en la mañana de este viernes que le entregaron el cuerpo de su pareja lo vio y tenía al menos cuatro heridas de armas de fuego y varias cortadas profundas, una en su garganta.
«Nos contaron que la pelea empezó a las 7:00 de la noche y que ya a las 10:00 de la noche había 30 muertos; queremos claridad sobre lo que realmente pasó con nuestros seres amados», dijo Yesenia con la voz ahogada en llanto.
En el mismo sentido se pronunció Iván Darío Gutiérrez, de la organización de Derechos Humanos Corpifamca: «Se sabe que alrededor de las 10:30, 11:00 de la noche, ya había más de 30 muertos por arma corto punzante y eso Medicina Legal lo tendrá que corroborar en las autopsias porque se sabe que muchos internos murieron antes, inclusive del mismo incendio. Se hizo un llamado de muchas maneras de los internos al personal de custodia para que activaran las alarmas», le dijo a los medios de comunicación.
Por otra parte, el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses reveló a través de un comunicado, que finalizaron los análisis forenses de los cuerpos de los presos que fallecieron en la cárcel de Tuluá, Valle, el pasado martes 28 de junio. Y aunque Medicina Legal no establece en el informe las causas de la muerte, sí referencia la identidad y edad de cada uno de los fallecidos.
No obstante, familiares de algunos de las víctimas fatales, indicaron que sus cuerpos no presentaban signos de quemaduras por el fuego, sino heridas de arma blanca y algunos hasta de arma de fuego.
Desde la organización que vela por los derechos humanos, Corpifamco, indicaron que han podido documentar el caso de 25 internos cuyas familias indican que tienen serias dudas de la causa real de sus muertes, pues los cadáveres presentan heridas, sobre todo con armas cortopunzantes.
Extraoficialmente se conoció que, de los cuerpos, solo dos estaban irreconocibles por las quemaduras y al menos tres presentaban graves heridas.




