La comunidad del corregimiento de Chucunes, en el municipio de Ricaurte, Nariño, se encuentra consternada tras el violento asesinato de Jesús Oswaldo López, un residente de la vereda San Isidro. La víctima, de 30 años, recibió cinco impactos de bala la noche del 15 de marzo de 2025, cuando se encontraba en un establecimiento público. Según testigos, dos hombres y una mujer lo sacaron del lugar y, sin mediar palabra, le dispararon a quemarropa.
Después del ataque, los habitantes de la zona alertaron a las autoridades, quienes acudieron de inmediato para atender la emergencia. López, gravemente herido, fue trasladado al hospital de Ricaurte, donde los médicos intentaron estabilizarlo. Sin embargo, debido a la gravedad de las heridas, fue remitido a un centro asistencial de mayor complejidad en Túquerres.
¡Recibió varios disparos! Lo asesinaron en Ricaurte
Temas de interés:
A pesar de los esfuerzos del personal de salud, López llegó al hospital sin signos vitales. Minutos después, los galenos confirmaron su deceso, mientras que las unidades judiciales se dirigieron al lugar para realizar el levantamiento del cuerpo. La trágica noticia conmocionó a familiares y amigos, quienes exigen justicia y esclarecimiento de los hechos.
Las autoridades iniciaron las investigaciones para identificar a los responsables de este crimen. Hasta el momento, no se han revelado mayores detalles sobre los agresores ni los posibles motivos detrás del ataque. No obstante, la comunidad espera que las autoridades intensifiquen las acciones para capturar a los implicados y evitar que hechos similares se repitan en la región.
Siga leyendo:
- ¡Emprendimiento femenino! Secretaría de la Mujer y elempleo
- ¿Cuántas multas necesita para perder su licencia de conducción?
Este asesinato ha generado preocupación entre los habitantes de Ricaurte, quienes temen por su seguridad ante el aumento de la violencia en la zona rural. La comunidad insta a las autoridades a reforzar la presencia policial y garantizar medidas de protección para evitar más tragedias. Mientras tanto, el dolor y la incertidumbre se apoderan de los allegados de la víctima, quienes claman por justicia.
