El caso de Pawell Restrepo, un ingeniero que perdió la vida tras ser atropellado en la localidad de Kennedy, Bogotá, vuelve a ser objeto de investigación judicial. Un juez de la República ordenó reabrir el proceso luego de considerar que existen elementos probatorios que ameritan una revisión a fondo.
Según la denuncia de la familia, Restrepo habría sido víctima de escopolamina en un bar del sector. A pesar de haber sido encontrado en estado de desorientación por unidades de la Policía, no recibió la atención necesaria y fue dejado en vía pública, lo que facilitó que poco después fuera atropellado mortalmente.
Negligencia y reclamo de justicia
El caso había sido archivado inicialmente, pero tras insistentes solicitudes de la familia y nuevas pruebas aportadas, el juez dio luz verde a la reapertura. En los próximos días se llevará a cabo una audiencia clave para definir las líneas de responsabilidad.
Los allegados del ingeniero exigen que se investigue a fondo la actuación de los agentes involucrados, así como al establecimiento donde presuntamente fue drogado. “No vamos a descansar hasta que haya justicia para Pawell”, declaró un vocero de la familia.
