El nombre de ‘alias Giovanny’ resuena con preocupación en el Cañón del Micay, una de las zonas más convulsas del departamento del Cauca. Este disidente de las FARC, que ha escalado posiciones en la estructura criminal, es señalado por las autoridades como el posible heredero del control territorial y las rentas ilícitas en esta estratégica región.
Según los informes de inteligencia militar, ‘Giovanny’ se ha distinguido por su crueldad y su capacidad para orquestar ataques contra la Fuerza Pública y amedrentar a la población civil. Su ascenso al poder preocupa a las autoridades, ya que podría intensificar la confrontación armada y agudizar la crisis humanitaria en el Cañón, una zona clave para el narcotráfico y la minería ilegal. La inestabilidad en la región, sumada a la presencia de este temido cabecilla, pone a la población en una situación de riesgo inminente.




