Sudáfrica ha detectado una nueva variante del coronavirus en su territorio, bautizada como ómicron o B.1.1.529 y, como con el batido de las alas de una mariposa, la alerta se ha extendido por todo el mundo. Reino Unido, Israel, la Unión Europea y otros gobiernos están imponiendo restricciones a las llegadas desde el país, mientras la comunidad científica trabaja por conocer más sobre este «alto número de mutaciones» concentradas en una sola variante. Por su parte, la OMS ya la ha definido como «preocupante» y el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC) advierte: el riesgo de transmisión en Europa es «de alto a muy alto».
Muchas mutaciones, ¿cuáles son los riesgos?
«La nueva variante es realmente preocupante a nivel mutacional», ha afirmado el profesor Tulio de Oliveira, director del Centro de Respuesta Epidémica e Innovación de Sudáfrica y unos de los principales científicos trabajando en la secuenciación del genoma. Aunque todavía no se conocen con exactitud los riesgos (si es más contagiosa, provoca enfermedad más grave o escapa a las vacunas) los investigadores sudafricanos han explicado que ómicron contiene más de 30 mutaciones en la proteína spike del coronavirus, que es la que permite la entrada en las células humanas y en la que se basa la efectividad de las vacunas.
«Tiene características y mutaciones de las otras cuatro variantes de interés. Se comporta de manera similar a la alfa en algunas pruebas de diagnóstico; tiene mutaciones que son muy similares a las variantes beta y gamma, que confieren cierto nivel de escape inmunológico; y tiene mutaciones que están cerca del sitio de corte por furina del virus que permite que la variante Delta sea más transmisible. Así que, a primera vista, parece que esta variante tiene las dos características que más nos preocupan, que son una alta transmisibilidad y cierto nivel de escape inmunológico», ha explicado, por su parte, el investigador Salim Abdool Karim, expresidente del Comité Asesor Ministerial de Sudáfrica sobre COVID-19, como recoge Reuters.
El científico, no obstante, ha recordado que esto son solo indicios,»extrapolaciones» basadas en las mutaciones que se han observado, pero «no son hechos». Apenas se acaba de descubrir la existencia de la variante y «hemos tenido la suerte de identificarla bastante pronto», ha señalado Salim Abdool Karim.
¿Es más contagiosa?
Todavía no está claro si ómicron es más transmisible que la variante delta, predominante en el mundo actualmente, aunque «todo parece indicar que así es», según ha reconocido el epidemiólogo Daniel López Acuña en RNE. Como recuerda la Organización Mundial de la Salud (OMS), «no sabemos demasiado sobre ella todavía». La entidad internacional está realizando estudios epidemiológicos para poder determinar si el aumento de los casos en las zonas de Sudáfrica afectadas por ómicron se debe a la variante o a otros factores sociales.
Y, precisamente por ese desconocimiento, la variante B.1.1.529 está suscitando tanto debate e interés de la comunidad científica. No basta con estudiar el genoma, hay que observar cómo se comporta en la realidad, «porque cuando se combinan las mutaciones muchas veces no es exactamente lo mismo que cuando las miramos cada una individualmente», ha aportado Iñaki Comas, investigador del Instituto de Biomedicina de Valencia del CSIC, en otra entrevista en RNE.
Pero, ¿por qué tanta alarma con pocos casos secuenciados? Mireia Coscollá, microbióloga de la Universidad de Valencia y del CSIC, lo ha explicado en el Canal 24 Horas de TVE: «Hay pocos casos detectados, pero en un periodo muy corto, eso indica que hay bastante transmisión».
¿Provoca una enfermedad más grave?
Más allá de la contagiosidad, la cuestión gira en torno a la gravedad de la enfermedad provocada por ómicron. De nuevo, todavía faltan datos, pero las primeras informaciones permiten afirmar que los síntomas son muy similares a los de las otras variantes conocidas y son leves en los vacunados que se contagian. «Nuestra vigilancia hospitalaria muestra un pequeño repunte, pero nada tan dramático como en olas anteriores. Así que la perspectiva es buena, aunque estamos en los primeros días» de la investigación, ha explicado Barry Schoub, asesor científico del Gobierno de Sudáfrica.
La OMS ha detallado que existe «un aumento de las tasas de hospitalización en Sudáfrica, pero esto puede deberse al aumento del número total de personas que se infectan, más que a un resultado de la infección específica con ómicron». En un informe, este lunes, ha puntualizado que los primeros brotes han ocurrido entre estudiantes universitarios, es decir, personas más jóvenes que tienden a padecer una enfermedad más leve.
En cualquier caso, hay que tener en cuenta también que la nueva variante circula sobre todo en países con bajas tasas vacunales, por lo que están más desprotegidos frente a la COVID-19 grave. En Sudáfrica, menos del 25 % de la población ha recibido la pauta completa de las vacunas y las coberturas son aún más bajas en países del entorno.
¿Escapa a las vacunas?
Además, hasta ahora, se ha informado de casos anecdóticos de reinfecciones y en personas vacunadas, pero «en esta fase es demasiado pronto para decir nada», ha valorado Penny Moore, viróloga de la Universidad de Witwatersrand en Johannesburgo, cuyo equipo trabaja en descifrar la capacidad de B.1.1.529 para escapar a la protección de las vacunas, como ya hizo con la variante beta.
Les preocupan las mutaciones en la proteína spike, que es la parte del virus que reconocen los anticuerpos para actuar, no obstante, Moore también ha advertido que existen indicios de que la nueva variante podría esquivar la inmunidad conferida por las células T, otra herramienta importante de nuestro sistema inmunitario, como recoge una nota de Nature.
En cualquier caso, la OMS ha recalcado en su informe que las «vacunas actuales siguen siendo eficaces contra la enfermedad grave y la muerte», así como los tratamientos actuales (corticosteroides y los bloqueadores de los receptores de la IL6) en caso de infección. Se continuará evaluando esta cuestión en todo momento para conocer el impacto y poder actuar al respecto.




