
Imagen: Ukrainian Presidential Press Service/Handout via REUTERS
Aunque Washington insta a Kiev a realizar concesiones, el plan de Trump es objeto de críticas como un «plan de capitulación». ¿Es tan desesperada la situación en Ucrania que el país tenga que admitirla?
De acuerdo con Axios y otros medios, el plan de paz de Donald Trump contemplaría la soberanía de Moscú sobre la península de Crimea en Ucrania. Su meta es detener el conflicto en el frente y brindar garantías de seguridad a Ucrania. Se ofrecería a Ucrania devolverle una pequeña porción de la región de Jarkiv, que está ocupada por el Ejército ruso, además de permitirle cruzar sin dificultades el río Dniéper, que discurre a lo largo de la línea de frente en el sur de Ucrania.
Las sugerencias de Trump también contemplan el acuerdo de que Ucrania no se integrará a la OTAN, aunque podría entrar a la UE, la liberación de las sanciones aplicadas a Rusia desde 2014 y la expansión de la colaboración económica con Estados Unidos, principalmente en los ámbitos de energía e industria.
Tras la divulgación de las propuestas de Estados Unidos, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, afirmó que Ucrania no aceptaría la ocupación rusa de Crimea. Yulia Sviridenko, la viceprimera y ministra de Economía de Ucrania, publicó en la red social X: «Ucrania se muestra preparada para negociar, pero no para abandonar». Entonces, Trump sostuvo que Zelenski había «complicado» las conversaciones con sus declaraciones acerca de Crimea y que la situación en Ucrania era «desastrosa».
¿Cómo es la situación de verdad en Ucrania?
Sergii Kusan, administrador del Centro Ucraniano para la Seguridad y la Cooperación, expresó a DW que el panorama en Ucrania solo se asemeja a una catástrofe en la visión de Donald Trump. Las Fuerzas Armadas de Ucrania están alcanzando triunfos tácticos en ciertos sectores del frente, la industria de armamento del país está en expansión, y sus aliados europeos se están agrupando progresivamente alrededor de Ucrania y la respaldan. Sin embargo, lo crucial es que el Ejército de Ucrania sigue aniquilando el potencial de las fuerzas rusas.
«Nuestro estado actual es considerablemente más favorable que hace un año.» «Hoy estamos efectuando disparos contra los rusos con la misma intensidad, o incluso superior a la de ellos», declaró Kusan No obstante, reconoce que el Ejército ruso también ha conseguido triunfos tácticos en el escenario bélico, como la ocupación de ciertas ciudades pequeñas de Ucrania en el este de la nación. «La declaración rusa de que nuestro sistema defensivo se derrumbaría y ellos tomarían control de toda Ucrania, es una auténtica fantasía. «Simplemente no poseen las reservas necesarias para hacerlo», subraya Kusan.
Hanna Schelest, especialista del grupo de análisis ucraniano Prism, sostiene que cada vez que Steve Witkoff, enviado especial del presidente de Estados Unidos, vuelve de Moscú y dialoga con Trump, muestra una «visión rusa de la realidad»: esta se basa en que Rusia es más potente y tiene la capacidad de prolongar la guerra por mucho tiempo, mientras que Ucrania es frágil y nadie la requiere. Así pues, Trump está convencido de que está realizando algo positivo por Ucrania. «Quien acuda a la Casa Blanca para reunirse con Trump, debería transmitirle lo mismo que Ucrania le está comunicando», afirmó Shelest.

Imagen: Kevin Lamarque/REUTERS
¿Qué pasará en Ucrania?
Los observadores están de acuerdo en que la propuesta de Trump de reconocer legalmente a Crimea como territorio ruso será rechazada. Respecto a impedir que Ucrania se adhiera a la OTAN, resulta más difícil. «Si no se determina explícitamente que Ucrania no tiene derecho a formar parte de la OTAN, se podría prometerle de manera extraoficial su adhesión, pero esto no sucederá de inmediato.» «También es posible que el poder estatal en Washington y Moscú cambie en algún momento», sostuvo la experta.
Volodimir Fesenko, un politólogo de Ucrania, sostiene que Estados Unidos sigue la senda equivocada, ya que ejerce presión sobre Ucrania y la forza a realizar concesiones significativas. Simultáneamente, no obstante, agradaría a Rusia, a pesar de que las partes en conflicto en el frente mantienen prácticamente la misma postura, sin importar las declaraciones de Trump. Fesenko insinúa que, al no haber conseguido forzar a Ucrania a aceptar un pacto de paz desfavorable, Estados Unidos podría hacer un receso hasta que sea el momento más adecuado, pero sin abandonar oficialmente el proceso de negociación. «Esto resulta perjudicial para nosotros, pero indudablemente no es más dañino que reconocer a Crimea como parte de Rusia, ya que lo que sucedería posteriormente sería aún más dañino. «Se agregarían más regiones y solicitudes», afirmó Fesenko.




