El reconocido cantante góspel reveló ante las cámaras del programa de entretenimiento Lo Sé Todo, que en el año 2019 vivió una situación que lo afectó demasiado en su vida personal y profesional, pues debido a problemas de salud, pensó que su vida estaba a punto de terminar.
Los hechos se dieron en medio de una época en la que el artista tenía mucha carga laboral y compromisos que lo obligaban a estar ocupado la mayor parte del día, por lo que empezó a sentir ciertos problemas de salud que le estaban dificultando disfrutar de la vida cada vez más.
Entre giras de medios y presentaciones por diferentes países, su cuerpo empezó a enviar cada vez más alarmas de que algo no andaba bien con su salud, sin embargo, el intérprete de ‘El sonido del silencio’ no le prestó mucha atención, pues en un principio pensó que se trataba de un desbalance en corporal debido al cambio de alturas y el nivel de estrés que estaba manejando en el momento.
Todo cambió el día en el que lastimosamente, los síntomas que presentaba fueron tan fuertes, que Alex terminó desmayándose y se vio obligado a recibir atención médica de inmediato para averiguar qué era lo que realmente estaba pasando.
El profesional de la salud que lo atendió le dio un diagnóstico que no fue muy alentador para el cantante y su familia. “Tenía una arritmia cardiaca, me tenían que operar, me asusté más que el fuerte dolor de garganta que me dio en el 2022″, confesó Campos.
Luego de la dura noticia que recibió, Alex estuvo aproximadamente tres meses preparándose para poder recibir la intervención quirúrgicas que lo ayudaría a resolver este problema y disminuir sus malestares. Situación que lo obligó a cancelar una gran cantidad de actividades musicales de trabajo.
El artista confesó que durante todo el proceso estuvo muy asustado y preocupado, no solamente por su salud, sino por el futuro de sus hijos y cómo su enfermedad podía afectar la cotidianidad de su familia. Sin embargo, el día en el que debía realizarse la operación, justo antes de entrar al quirófano, oró con mucha fe para que todo saliera de manera correcta.
No obstante, el cardiólogo le informó que el procedimiento no se llevaría a cabo, y a los 15 días su corazón logró estabilizarse y pudo continuar con sus actividades como de costumbre y disfrutando de la compañía de su familia y amigos más cercanos.




