¿Qué es la amusia y cómo afecta al cerebro musical?

¿Qué es la amusia y cómo afecta al cerebro musical?
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¿Qué es la amusia?

La amusia es un trastorno neurológico poco conocido que impide a quienes lo padecen percibir la música de forma normal. Afecta la capacidad para distinguir tonos, ritmos o melodías, haciendo que la música suene como ruido desorganizado o sin estructura.

Este trastorno no está relacionado con la sordera ni con una falta de interés por la música. De hecho, muchas personas con amusia desean disfrutar de ella, pero simplemente no logran procesarla correctamente.

Tipos de amusia: congénita y adquirida

La amusia se presenta en dos formas principales: congénita y adquirida.

La amusia congénita es la más frecuente. Se manifiesta desde el nacimiento y afecta cerca del 4% de la población. Estas personas no pueden entonar canciones correctamente, reconocer melodías conocidas o seguir el ritmo, incluso si tienen audición normal.

En cambio, la amusia adquirida aparece como consecuencia de una lesión cerebral, generalmente después de un accidente cerebrovascular, un traumatismo craneoencefálico o una cirugía en zonas del cerebro relacionadas con la audición, como el lóbulo temporal derecho.

¿Cómo afecta la amusia a la vida diaria?

Aunque la amusia no suele interferir con otras funciones cognitivas, sí puede tener impacto emocional y social. La música es parte fundamental de muchas interacciones cotidianas: fiestas, eventos familiares, películas o celebraciones.

Quienes tienen amusia pueden sentirse aislados o incómodos en contextos donde la música tiene un papel protagónico. Además, pueden experimentar frustración al no poder disfrutar de algo que es placentero para la mayoría.

En los casos más severos, la música puede incluso resultar molesta, pareciendo ruido incoherente más que una composición estructurada.

¿Tiene tratamiento?

Actualmente no existe una cura definitiva para la amusia, especialmente en su forma congénita. Sin embargo, en casos de amusia adquirida, se han utilizado terapias de rehabilitación musical, con resultados variables dependiendo del daño cerebral y del trabajo terapéutico.

La investigación continúa avanzando para comprender mejor los mecanismos cerebrales involucrados y desarrollar tratamientos más efectivos.

La música y el cerebro: una conexión compleja

La amusia nos recuerda que la música no solo se escucha, también se procesa a través de redes complejas en el cerebro. Comprender este trastorno permite no solo desarrollar empatía hacia quienes lo padecen, sino también abrir la puerta a nuevas investigaciones sobre cómo experimentamos la música desde lo neurológico.


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