Vladimir Putin, el líder de Rusia, está visitando Mongolia pero no parece que el país acepte los pedidos de arresto de la CPI por presuntos crímenes de guerra en Ucrania.
Según imágenes publicadas por medios oficiales rusos, el presidente ruso, Vladimir Putin, recibió a su homólogo mongol, Ukhnaagiin Khürelsükh, en una ceremonia fastuosa en la plaza central de Ulán Bator.
Putin ha realizado una visita oficial a Mongolia, una nación miembro de la Corte Penal Internacional (CPI), desde que la CPI emitió una orden de detención en su contra por crímenes de guerra hace aproximadamente 18 meses.
Mongolia, en una situación difícil
La situación de Mongolia se ve comprometida por su visita. Aunque Mongolia es un país sin salida al mar que depende en gran medida de Rusia para el combustible y parte de su electricidad, los miembros de la corte internacional están obligados a detener a los sospechosos si se ha emitido una orden de arresto. Y la corte carece de un método para hacer cumplir sus decisiones.
Una guardia de honor vestida con uniformes vibrantes de rojo y azul, similares a los del gobernante del siglo XIII Genghis Khan, el fundador del Imperio Mongol, recibió al líder ruso en una ceremonia en la plaza principal de la capital.
Para sus reuniones, Putin y el presidente mongol Ukhnaa Khurelsukh ascendieron las escaleras alfombradas de rojo del Palacio de Gobierno y se inclinaron ante una estatua de Genghis Khan. Luego, entraron al edificio gubernamental.
