Moscú, Rusia – El presidente ruso, Vladimir Putin, ha dado la orden de iniciar la producción en serie del nuevo misil hipersónico «Oreshnik», tras su reciente lanzamiento en Ucrania. Este misil, que tiene un alcance de hasta 5,500 km, fue utilizado en respuesta a los bombardeos ucranianos con proyectiles occidentales2.
El «Oreshnik» es un misil balístico hipersónico con capacidad nuclear, diseñado para ser prácticamente imposible de interceptar. Durante una reunión televisada con altos mandos militares, Putin destacó la «fuerza particular y la potencia» de esta arma, y subrayó la importancia de continuar con las pruebas en condiciones de combate.
El lanzamiento del «Oreshnik» ha generado una respuesta inmediata por parte de Ucrania, cuyo presidente, Volodimir Zelenski, ha solicitado a sus aliados la entrega de nuevos sistemas de defensa antiaérea para protegerse de esta nueva amenaza. Actualmente, Ucrania cuenta con sistemas Patriot estadounidenses y el equivalente franco-italiano Samp/T, pero en número insuficiente para proteger todas sus ciudades1.
La comunidad internacional ha reaccionado con preocupación ante esta escalada en el conflicto. Un alto funcionario estadounidense minimizó la amenaza del nuevo misil ruso, calificándolo como un arma experimental con un número limitado de unidades. Sin embargo, la OTAN ha convocado una reunión urgente para discutir las implicaciones de este desarrollo y coordinar una respuesta adecuada4.
El conflicto en Ucrania continúa intensificándose, y la introducción del «Oreshnik» añade una nueva dimensión a la guerra, aumentando las tensiones y la incertidumbre en la región.




