Una creciente preocupación se apodera de los conductores y habitantes del sector rural cercano al aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón, en el Valle del Cauca, debido al avanzado deterioro estructural del puente que conecta esta terminal aérea con la zona industrial y logística de Cencar.
La estructura, que se extiende por cerca de 200 metros, fue cerrada por completo hace tres meses tras detectarse una grieta longitudinal en su superficie y un desnivel pronunciado en uno de sus costados, lo que representaba un inminente riesgo para la seguridad vial.
Desde entonces, las autoridades decidieron habilitar el carril contrario como vía provisional para mantener la conexión entre ambos puntos. No obstante, este desvío también ha comenzado a mostrar signos preocupantes de desgaste y fisuras.
Los usuarios frecuentes, entre ellos conductores de vehículos de carga, trabajadores del aeropuerto, transportadores y residentes de veredas aledañas como El Placer y Ciénaga Honda, han manifestado su inconformidad por lo que consideran una falta total de acción por parte de las entidades responsables.
“Solo colocaron cintas y señales, pero no han hecho ninguna intervención real. El paso habilitado ya está cediendo y si colapsa también, quedaremos completamente incomunicados”, advirtió un líder comunitario del sector.
El puente no solo cumple un rol estratégico para la conexión con el aeropuerto internacional, sino que también es clave para el tránsito de productos agrícolas y mercancías hacia Cali y otras zonas del suroccidente del país.
Hasta el momento, ni el Departamento de Infraestructura del Valle del Cauca ni la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo han anunciado un plan formal de intervención, lo que ha generado molestia entre los gremios del transporte y sectores productivos de la región.
La situación también ha afectado negativamente los tiempos de desplazamiento, incrementando los costos de operación para transportadores, quienes ahora deben realizar maniobras más lentas y riesgosas por una vía alterna deteriorada y con tráfico pesado.
Ingenieros consultados por medios locales han advertido que, de no actuarse a tiempo, el daño podría extenderse a las bases estructurales del puente, encareciendo la reparación y aumentando el riesgo de colapso total.
En redes sociales han circulado imágenes que muestran el avance del daño en el carril en uso, lo que ha generado llamados urgentes al Gobierno departamental para que priorice la obra y evite una tragedia mayor.
Mientras tanto, la comunidad continúa exigiendo soluciones inmediatas y la asignación de recursos técnicos y financieros para una reparación estructural definitiva, que garantice la seguridad de todos los usuarios.




