El Paris Saint-Germain afronta este miércoles un nuevo reto internacional al disputar la Supercopa de Europa frente al Tottenham Hotspur, en un choque que se llevará a cabo en el Stadio Friuli de Udine, Italia. El duelo, que comenzará a las 21:00 h (hora de Europa Central), servirá como apertura oficial de la temporada para ambos equipos y como termómetro para medir su estado de forma tras la pretemporada.
El conjunto parisino llega con el impulso de una campaña histórica en la que levantó la Ligue 1, la Copa de Francia y la Champions League, con una final continental que todavía resuena por el aplastante 5-0 sobre el Inter. Ahora, con Luis Enrique en el banquillo, el PSG busca sumar la Supercopa a su vitrina y dar el primer paso en un año que podría aspirar a un sextete soñado.
Enfrente estará un Tottenham en plena reconstrucción bajo la dirección de Thomas Frank. Los londinenses tendrán ausencias importantes como las de Maddison, Kulusevski y Dragusin, además de la baja de Yves Bissouma por indisciplina interna. Aun así, el equipo inglés ve este duelo como una oportunidad para comenzar la era Frank con un título y enviar un mensaje de ambición en la escena europea.
En el PSG también hay contratiempos. Nordi Mukiele no estará disponible por lesión y Gianluigi Donnarumma quedó fuera de la convocatoria, confirmando así su salida del club. Luis Enrique admitió que varios jugadores todavía no han alcanzado su mejor nivel físico tras las vacaciones, y figuras como Marquinhos y Nuno Mendes han reconocido que les falta ritmo competitivo.
El favoritismo recae en el campeón francés, que contará con jugadores como Ousmane Dembélé, elegido mejor futbolista de la pasada Champions, para marcar la diferencia. Las casas de apuestas refuerzan esa condición, aunque advierten que el Tottenham, con su estilo intenso y transiciones rápidas, podría incomodar y poner en aprietos a los parisinos si logra golpear primero.
El partido promete un choque de estilos: el PSG buscará imponer su posesión y calidad técnica, mientras que los Spurs apostarán por la presión alta y la velocidad en ataque. Más allá del trofeo, ambos equipos saben que este compromiso puede marcar el tono del inicio de la temporada, y que una victoria enviaría un mensaje claro al resto de Europa.




