Una manifestación de jubilados apoyada este miércoles por hinchas de fútbol y organizaciones sociales en Argentina derivó en enfrentamientos con la policía que dejaron más de 100 detenidos y al menos 20 heridos, uno de ellos grave, y desecandenó cacerolazos nocturnos en repudio al gobierno de Javier Milei. En la tarde del miércoles, manifestantes, muchos identificados con camisetas y banderas de una treintena de clubes de fútbol, fueron desplazados por la policía de la zona del Congreso y de la Plaza de Mayo con balas de goma, gases lacrimógenos y camiones hidrantes.
Los disturbios comenzaron a media tarde cuando los manifestantes, convocados también por organizaciones sociales y sindicales, desafiaron los cordones policiales que buscaban despejar las vías frente al Congreso. Un patrullero y una moto policial se prendieron fuego y más de 100 personas fueron detenidas, informó la policía. “¡Que se vayan todos!”, era un canto a veces unánime, y algunos manifestantes lanzaban piedras tomadas de veredas rotas, petardos y bombas de estruendo, mientras un numeroso cordón policial avanzaba sobre las calles.




