A su corta edad, Juan Martín Castrillón Jaramillo ya comienza a escribir una historia inspiradora en el fútbol internacional. El joven arquero, oriundo de Tuluá, acaba de ser fichado por el Inter Miami F.C., uno de los clubes con mayor proyección en el fútbol estadounidense.
Con apenas 14 años y una imponente estatura de 1.83 metros, Juan Martín ha sido observado por visores técnicos que vieron en él no solo condiciones físicas ideales para el puesto, sino también disciplina, técnica y visión de juego.
Su formación inició en la Escuela Jhonathan Torres, ubicada en el Centro Comercial de Tuluá, donde desde temprana edad comenzó a desarrollar sus reflejos, coordinación y posicionamiento bajo los tres palos.
Posteriormente, su crecimiento deportivo lo llevó a la Academia Diego Espinosa – Semillas Tuluá, un semillero reconocido por potenciar talentos locales y preparar jóvenes para competir en escenarios de alto nivel.
Actualmente, Juan Martín entrena en la academia Ives Estates Soccer en Miami, un espacio competitivo que le ha permitido enfrentar rivales exigentes, desarrollar fortaleza mental y mostrar su nivel frente a entrenadores profesionales.
Fue en esa misma academia donde su rendimiento empezó a llamar la atención de representantes del Inter Miami, club donde hoy milita y continúa su formación especializada como portero de élite.
Además de sus entrenamientos habituales, el joven tulueño ha sido integrado a la academia de arqueros del Inter Miami F.C., donde recibe instrucción directa de entrenadores capacitados en metodologías de alto rendimiento.
Este proceso ha significado una gran responsabilidad y al mismo tiempo una oportunidad invaluable para el arquero vallecaucano, quien ha demostrado adaptarse con rapidez a las exigencias del fútbol formativo internacional.
Para el fútbol del Valle del Cauca, la noticia representa un motivo de orgullo, pues Juan Martín es uno de los pocos jugadores de su edad en ser fichado por una institución internacional de este nivel.
En Tuluá, sus antiguos entrenadores celebran el logro con emoción. “Es un joven muy centrado, disciplinado y con grandes condiciones. Desde pequeño mostró que tenía madera para grandes cosas”, expresó uno de sus formadores.
La familia del arquero también ha sido clave en su proceso, brindándole el apoyo emocional, logístico y académico necesario para mantenerse enfocado en sus sueños deportivos sin descuidar su desarrollo integral.
Con este nuevo paso, Juan Martín Castrillón Jaramillo continúa su camino con humildad y determinación, soñando con vestir algún día los colores de una selección nacional y consolidarse como arquero profesional en el fútbol mundial.
