El Tribunal Superior de Neiva confirmó la condena de 16 años de prisión contra César Augusto Quintero Amaya, profesor hallado culpable de abusar sexualmente de una estudiante de 12 años en Baraya, Huila.
La ratificación de la pena, que ya había sido dictada en primera instancia el 30 de abril de 2021, incluye además la prohibición de ocupar cargos públicos por el mismo tiempo. La decisión se sustentó en las pruebas presentadas por la Fiscalía General de la Nación, que demostraron sin lugar a dudas la responsabilidad del agresor.
Hechos aberrantes
Los investigadores establecieron que el caso ocurrió en febrero de 2012. La menor asistía a clases dictadas por Quintero Amaya, quien aprovechó su autoridad para cerrar la puerta del salón, tomarla por la fuerza y cometer el abuso.
La agresión fue tan grave que dejó como consecuencia un embarazo, hecho que aumentó la gravedad de los cargos y sumó dolor a la vida de la víctima y su familia.
Justicia cumplida
Con la decisión del Tribunal, la condena queda en firme y Quintero Amaya deberá cumplir la pena completa en un centro carcelario. Según la Fiscalía, este fallo envía un mensaje claro: los delitos sexuales contra menores no quedarán impunes, así hayan pasado años desde que ocurrieron.
En Baraya, la comunidad reaccionó con indignación y rechazo. Muchos vecinos aún recuerdan el caso como una herida abierta en el pueblo. Padres de familia y docentes coincidieron en que la sentencia es un paso importante para que las víctimas sientan que la justicia llega, aunque tarde.
La condena, además, reabre el debate sobre la necesidad de reforzar los controles y la vigilancia en entornos escolares para proteger a los menores de este tipo de agresores.