En una gran problemática social se ven envueltas las empresas mineras y los guaqueros en el occidente de Boyacá, por las áreas de explotación que hoy hacen parte de las concesiones mineras sobre las que un grupo de guaqueros reclama derechos.
“Luego de subir unos 30 kilómetros desde Chiquinquirá por una carretera sinuosa, llegamos al Otro Mundo, un mirador desde el que se divisa un valle profundo que avanza hacia el occidente. A lo lejos los cerros de Fura y Tena. Entre las dos montañas pasa el río Minero, que recorre toda la zona arrancándole a esas peñas las esmeraldas” dijo Alexander Guevara, procurador Regional de Boyacá.
Por esta razón, y ratificando su compromiso indicaron que desde la Procuraduría se están buscando estrategias para brindarles mejores garantías y oportunidades a los habitantes de Muzo, Quípama, Maripi, San Pablo de Borbur y Pauna, quienes manifiestan no querer dejar la minería.
Por su parte, Andrea Yunis, Procuradora Provincial de Chiquinquirá insistió en que se respete y se cuiden las garantías de estos trabajadores.




