La Procuraduría General de la Nación avanza en una investigación disciplinaria contra el general Miguel Huertas y el director de Inteligencia Estratégica de la DNI, Wilmar Mejía, tras la revelación de presuntos vínculos con estructuras disidentes de las Farc lideradas por alias Calarcá.
Según conoció este medio, la Sala Disciplinaria analiza la posibilidad de imponer una suspensión provisional a ambos funcionarios en los próximos días, medida que buscaría evitar que su permanencia en los cargos interfiera en la recolección de pruebas o influya en el desarrollo del expediente.
El Ministerio Público investiga si Huertas y Mejía habrían entregado información reservada relacionada con movimientos militares y operativos en Antioquia, el Catatumbo y el sur de Bolívar, lo que habría beneficiado a grupos armados ilegales que operan en esas zonas.
Posible participación en creación de empresas fachada
Otro de los focos de la investigación es establecer si los dos funcionarios habrían ofrecido asesoría o apoyo a integrantes de dichas estructuras para conformar empresas de seguridad privada. Estas compañías, según las hipótesis del ente de control, podrían funcionar como fachada para legalizar el porte de armas y garantizar la continuidad de las disidencias en caso de una ruptura del proceso de diálogo con el Gobierno.




