Lo que parecía ser un procedimiento de rutina terminó por convertirse en un episodio de violencia callejera. En la mañana del martes 24 de junio, frente a las instalaciones del Hospital Piloto de Jamundí, ubicado en la Calle 16 #11-50, se registró un enfrentamiento entre un grupo de ciudadanos y agentes de tránsito del municipio.
El hecho ocurrió mientras los funcionarios adelantaban una inmovilización de una motocicleta, presuntamente por irregularidades en la documentación o en el uso del vehículo. Fue en ese momento cuando los ánimos comenzaron a caldearse.
Testigos relataron que el motociclista se mostró inconforme con la medida, lo que generó una discusión con los agentes de tránsito. La situación se salió rápidamente de control, atrayendo la atención de transeúntes y trabajadores del sector salud.
En cuestión de minutos, se produjo un altercado en el que se registraron empujones, gritos e incluso algunos intentos de agresión física. Las personas alrededor grabaron el enfrentamiento con sus celulares, y algunos videos comenzaron a circular por redes sociales.
Varios ciudadanos intentaron intervenir para calmar los ánimos, mientras otros avivaban la tensión con gritos e insultos hacia los funcionarios. La presencia policial fue necesaria para controlar la situación y evitar que pasara a mayores.
El secretario de Tránsito y Transporte de Jamundí, Néstor Lasso Viveros, lamentó profundamente los hechos y rechazó toda forma de violencia contra los agentes que, según dijo, estaban cumpliendo su deber conforme a la normatividad.
“Desde la Secretaría hacemos un llamado al respeto por la institucionalidad. Nuestros funcionarios cumplen una labor en el marco de la ley. Si existe alguna inconformidad, debe ser tramitada por las vías legales y no mediante la agresión”, declaró Lasso Viveros.
El funcionario también indicó que se revisará el procedimiento para verificar que se haya desarrollado bajo los protocolos establecidos, y anunció que se recopilarán los videos del incidente para esclarecer responsabilidades.
Por su parte, representantes de la comunidad exigieron mayor capacitación en manejo de conflictos para los agentes y mayor transparencia en los operativos, argumentando que algunos procedimientos pueden tornarse hostiles desde su inicio.
La situación ha generado un amplio debate en redes sociales, donde algunos usuarios respaldan la labor de las autoridades y otros critican la forma en que se ejecutan los controles viales en Jamundí.
Este tipo de hechos evidencian la tensión creciente entre ciudadanía y autoridades, especialmente en contextos donde las medidas de control se perciben como abusivas o mal gestionadas.
En lo corrido del año, la Secretaría de Tránsito ha adelantado múltiples operativos en diferentes puntos del municipio, con el objetivo de mejorar la seguridad vial. Sin embargo, algunos sectores señalan la necesidad de fortalecer la pedagogía ciudadana antes que la sanción directa.
Las autoridades aseguraron que continuarán realizando controles en puntos críticos como la zona hospitalaria, pero con mayor acompañamiento policial y revisión de protocolos para evitar nuevas confrontaciones.
Finalmente, se reiteró a la comunidad que la convivencia y el respeto mutuo son fundamentales para garantizar la seguridad en el espacio público. “No podemos permitir que la violencia se normalice como respuesta ante una medida legal”, concluyó el secretario Lasso Viveros.




