La comunidad del municipio le hace un llamado al mandatario Salomón Said ante el abandono de predios.
La alerta por fiebre amarilla, dengue y otras enfermedades transmitidas por vectores ha puesto en evidencia el grave abandono de varios predios en el municipio de Girardot. A través de un video ciudadano difundido en redes sociales, se denunció la existencia de una bodega enmallada ubicada sobre la avenida Ciudad de las Acacias, cerca al semáforo del barrio Miraflores, convertida en un foco de proliferación de zancudos.
En la grabación, el ciudadano hace un llamado urgente al alcalde Salomón Said y a la Secretaría de Salud, señalando la presencia de aguas estancadas, animales muertos, basura y condiciones altamente insalubres. «Esto parece una piscina podrida, una verdadera cama de vectores. Es inaceptable en medio de una emergencia sanitaria por fiebre amarilla», aseguró.
Se debe tener presente que dicha situación no es nueva para la comunidad, pues días anteriores, se había reportado una piscina verdosa abandonada frente a la terminal de transporte, sin que hasta ahora se conozcan acciones concretas por parte de la administración municipal. La comunidad teme que la inacción termine cobrando vidas, pues ya se han confirmado casos de enfermedades como chikunguña y zika en la región.
Expertos advierten que el control de vectores debe ser prioridad en zonas endémicas como Girardot, donde las altas temperaturas favorecen la reproducción del Aedes aegypti. Además, recuerdan que los criaderos artificiales como llantas, tanques destapados o charcos acumulados en predios baldíos representan una amenaza directa a la salud pública.
El silencio de las autoridades ha generado inconformismo entre los habitantes, que sienten que sus voces no son escuchadas. “No es justo que seamos nosotros los que siempre pongamos el pecho a las consecuencias de un Estado ausente. ¿Hasta cuándo vamos a vivir entre la basura y los zancudos?”, cuestionó un residente del sector.
Se exige una respuesta inmediata de la Alcaldía y la Secretaría de Salud, así como la aplicación de sanciones a los propietarios de predios en abandono que se han convertido en auténticos criaderos de enfermedades. La prevención es clave, pero sin voluntad política, solo quedarán las denuncias y las excusas.




